CIRO ALEGRÍA
Juan Rodríguez Jara
El perfume de los pétalos salvajes,
el trinar de las avecillas nocturnas,
el sonar del murmullo de los ríos,
los recodos de los grandes arrieros
y huellas de aguerridos caminantes;
mecieron la cuna de tus primeros días.
El canto amoroso de las nanas
en tu Huamachuco de recuerdos
que no dejaste en tus andares.
Las letras recogiste en surcos
abiertos en tus inolvidables jirones.
con la guía de don César Vallejo,
pintando pizarra tiza en mano
haciendo archivos para los viajes.
Trujillo, Chile y otras ciudades y lares
donde iban hilvanándose tus novelas
que llegaron en crepitar de imprentas
en versos ocultos de los sueños.
La serpiente de oro en recorridos
cortando las tierras y peñascos,
balseros remando en palos callados,
cuando lamía las aguas en playas,
enmudeciendo árboles en arrastres.
El Marañón une vidas y pueblos,
ahora sembrado de oro en arenas.
Compitió en concurso a ganadores
iniciando el camino de tus triunfos.
En zigzag los perros hambrientos
arrancó el premio de las novelas,
cuando Antuca llevaba sus rebaños
con wanca, zambo, hueso y pellejo;
la sequía arruinaba los caminares,
se evaporaban comidas en hostias
cegando cordilleras de nutrientes
para recoger su dolor, allí estabas,
inmortalizando tus animalitos.
Rosendo Maqui abriendo caminos
de la comunidad Rumi en retiradas,
arrogancia de gamonales en iras,
expulsaron a los pobres indios.
Llegando Benito Castro en adioses
armando huatias entre los ichus,
para conquistar las lejanas playas.
Indígenas andinas llegan en letras
para conquistar los mundos.
Ciro Alegría lejos de tus horizontes
pintaste para el mundo novelas,
traducidas en idiomas lejanos.
Sabio indígena saboreaste triunfos
más, a Rosendo Maqui no llevaste,
Antuca quedó triste con sus perritos.
Siguen batiendo aguas los balseros,
la serpiente de oro regalando quiebres,
el Marañón sigue siendo nuestro.
En caravana viajan, ahora todos
en colegios y retablos callados
levantando oraciones para indios,
para andinos ya costeños
a Ciro Alegría darán premios
por llevar el Perú a las galaxias,
suerte en las novelas leídas
suerte en la las esperas.
Juan Rodríguez Jara
El perfume de los pétalos salvajes,
el trinar de las avecillas nocturnas,
el sonar del murmullo de los ríos,
los recodos de los grandes arrieros
y huellas de aguerridos caminantes;
mecieron la cuna de tus primeros días.
El canto amoroso de las nanas
en tu Huamachuco de recuerdos
que no dejaste en tus andares.
Las letras recogiste en surcos
abiertos en tus inolvidables jirones.
con la guía de don César Vallejo,
pintando pizarra tiza en mano
haciendo archivos para los viajes.
Trujillo, Chile y otras ciudades y lares
donde iban hilvanándose tus novelas
que llegaron en crepitar de imprentas
en versos ocultos de los sueños.
La serpiente de oro en recorridos
cortando las tierras y peñascos,
balseros remando en palos callados,
cuando lamía las aguas en playas,
enmudeciendo árboles en arrastres.
El Marañón une vidas y pueblos,
ahora sembrado de oro en arenas.
Compitió en concurso a ganadores
iniciando el camino de tus triunfos.
En zigzag los perros hambrientos
arrancó el premio de las novelas,
cuando Antuca llevaba sus rebaños
con wanca, zambo, hueso y pellejo;
la sequía arruinaba los caminares,
se evaporaban comidas en hostias
cegando cordilleras de nutrientes
para recoger su dolor, allí estabas,
inmortalizando tus animalitos.
Rosendo Maqui abriendo caminos
de la comunidad Rumi en retiradas,
arrogancia de gamonales en iras,
expulsaron a los pobres indios.
Llegando Benito Castro en adioses
armando huatias entre los ichus,
para conquistar las lejanas playas.
Indígenas andinas llegan en letras
para conquistar los mundos.
Ciro Alegría lejos de tus horizontes
pintaste para el mundo novelas,
traducidas en idiomas lejanos.
Sabio indígena saboreaste triunfos
más, a Rosendo Maqui no llevaste,
Antuca quedó triste con sus perritos.
Siguen batiendo aguas los balseros,
la serpiente de oro regalando quiebres,
el Marañón sigue siendo nuestro.
En caravana viajan, ahora todos
en colegios y retablos callados
levantando oraciones para indios,
para andinos ya costeños
a Ciro Alegría darán premios
por llevar el Perú a las galaxias,
suerte en las novelas leídas
suerte en la las esperas.