OCTUBRE: MES MORADO DEL SEÑOR DE LOS MILAGROS
Por Juan Rodríguez Jara
Por Juan Rodríguez Jara
Décimo mes del año, con olor a primavera y juventud. Este año comenzó un domingo para terminar un martes, 31 días llenos de alegrías y adioses, siempre con hechos que para unos perdurarán, para otros pasarán al olvido.
Domingo primero, familiares y amigos rodean la torta y las velitas perdían su ondeante y vital llama por el soplo del cumpleaños: don José Beltrán Peña director fundador de la Sociedad Literaria Amantes del País, quien mes a mes recoge los versos viajeros para convertirlos en una antología, ventana abierta para muchos que no tienen donde publicar lo que escriben y sueñan, de esta manera gracias a Pepe llegamos a muchos confines, ingresamos a domicilios sin tocar puertas y las alas de versos en el espacio nos llevan al infinito.
Domingo primero de octubre, recostado sobre una almohada, compañera de dichas y penas, testigo de planes y soluciones, mantenía alerta a don Diego Vicuña Villar, que sus décimas llevó más allá de las fronteras de la blanquiroja, ganando un concurso en la tierra de los charros, premiado y antologado en muchas obras que le hicieron reconocido e importante decimista; el día anterior sábado 30 de setiembre quedaba su perfume primaveral y Diego sentía desfallecer el alma, dijo ayúdenme hasta mañana primero de octubre, concedido, llegó el amanecer, cuando se abrió el camino al cielo y comenzó a subir llevándose sus décimas, ahora se halla con Papa Dios porque así lo quiso. Falleció la misma fecha de su nacimiento, el canteño decimista se fue con sus 80 años de cantar al Perú, dejando un vacío en la Promoción GC. 1957, miércoles Día de Todos los Santos iremos a orar en su Misa y reencontrarnos con Diego Vicuña Villar.
Días vienen y se van, se festejó fechas, como de la marinera, pañuelo blanco en remolino bailando, se recordó a quien lo popularizo para identificar al Perú en el mundo, tantas otras actividades van apareciendo en los días morados y primaverales.
La mesa de trabajo en silencio, el lápiz y pinceles formados a un costado, la pinturas tratando de callar las mezclas, el papel y la tela en bastidor, esperando los trazos que no llegarán, se marchó nuestro querido Fernando de Zsyszlo, tomados de la mano, apretando para no separarse, iniciaron el viaje de la inmortalidad juntamente que su esposa. Ahora en el cielo puso un bastidor para pintar al Señor de los Milagros.
Las tablas del teatro, el micrófono, las guitarras, los familiares y amigos ya no se escuchará la voz inconfundible de aire Argentino de nuestro peruano Fernando de Soria quien también decidió irse en este mes de grandes acontecimientos.
“Adiós Pueblo de Ayacucho” los Andes con sus nevados y quebradas enmudecieron cuando callaron en luto las seis cuerdas de la guitarra compañera eterna del genio de la música andina don Raúl García Zárate, el sentimiento serrano es más profundo y el arco iris de sus colores cambiaron en sahúma de inciensos para que nuestro guitarrista de fama mundial llegue al cielo a tocar su guitarra cuando salga en procesión nuestro Señor de Los Milagros.
La vida continúa y sigue los festejos cerrando el mes con la jarana de la Canción Criolla, cuando los cajones repiquen las guitarras se rasguen, y las voces se sucedan al ritmo del zapateo de una canción afroperuana o salga la marinera a enseñorearse en su fiesta criolla, en los diferentes rincones de la patria peruana.
El Santísimo Señor de Los Milagros salió a derramar sus bendiciones al pueblo peruano y en las diferentes colonias en el extranjero. En la procesión se suceden los cargadores, los inciensos cubren de oraciones en humo al cielo llegan a Dios Padre. Ventanas y puertas se tiñen de morado en recuerdo a la pared de adobe con barro macerado en pisadas que mantiene a Cristo de Pachacamilla, gran redentor de la humanidad.
Así se va el mes morado del 2017, con recuerdos eternos o que se perderán en el tiempo; pero el Señor de Los Milagros su bendición nos deja porque es eterna.
CRISTO CRUCIFICADO
Hoy que las heridas se abrieron
la sangre fluye en consagración
a la paz, a la confraternidad y la unión
a la eterna y masiva reflexión.
Acuérdate del dolor de tus hijos,
no dejes que la sangre tiña
las cruces de mis apus
clavados en mis números caminos.
Derrama tu bendición en los hombres
de bien que cuidarán de mis hermanos;
erradicando los males de los demonios
volviendo al camino de fé y oraciones.
Tú, Dios poderoso
ampáranos en este dolor.
para que la vida, vuelva ser santa
y riegue los terrenos de la paz.
Bendice al coloso Huascarán
y al hermoso Alpamayo,
para que brillen con amor
en mi tierra ancashina.
Suficiente es señor
tu sangre sagrada derramada
que recorrió por el universo:
no nos abandones Dios mío.
Devuelve la paz a los hombres
a estas horas que te imploran
Señor de los Milagros poderoso
no sea en vano tus salidas.
Hoy que las heridas se abrieron
la sangre fluye en consagración
a la paz, a la confraternidad y la unión
a la eterna y masiva reflexión.
Acuérdate del dolor de tus hijos,
no dejes que la sangre tiña
las cruces de mis apus
clavados en mis números caminos.
Derrama tu bendición en los hombres
de bien que cuidarán de mis hermanos;
erradicando los males de los demonios
volviendo al camino de fé y oraciones.
Tú, Dios poderoso
ampáranos en este dolor.
para que la vida, vuelva ser santa
y riegue los terrenos de la paz.
Bendice al coloso Huascarán
y al hermoso Alpamayo,
para que brillen con amor
en mi tierra ancashina.
Suficiente es señor
tu sangre sagrada derramada
que recorrió por el universo:
no nos abandones Dios mío.
Devuelve la paz a los hombres
a estas horas que te imploran
Señor de los Milagros poderoso
no sea en vano tus salidas.