Acunoy - Bolognesi /Ancash - PERÚ
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Lima, 10 de junio de 2009
HOLA SHAY:
Cuando leo los mensajes y las fotograías que incorpora nuestro paisano ALEX MILLA CURI en las páginas electrónicas de la Internet, para mostrar al mundo las maravillas de 'Espejito del cielo', siento la tersura de la nívea piel del Huayhuash, y al mismo tiempo, el ímpetu del viento joven que acompaña su andar; pues su obra, en apariencia pequeña, tiene la grandeza del Yerupajá, la virginal belleza del entorno geográfico de nuestra tierra y el espíritu generoso de su gente.
Su trabajo, apuntando al desarrollo cultural de Bolognesi, da cuenta de manera cotidiana del quehacer laborioso del poblador que se faja parejo en el campo y la ciudad, con sus frentes bañadas de sudor y sus nobles corazones colmados de amistad telúrica; pero también, muchas veces dolido, por las hualancas que no faltan en el duro caminar del que construye con escasos recursos materiales, amplios peldaños de solidaridad, para que todos podamos subir la cuesta del progreso, como hermanos.
Coversando sobre la fecunda labor de Alex, me decía hace poco nuestra poeta y declamadora nacional Anatolia Aldave Reyes, que los homenajes a tiempo, aligeran las alas de los sueños e impulsan la obra del comunicador social. Obra que habitualmente recorre duros caminos, asfixiado por el centralismo que vive de espaldas al ande que le brinda sustento diario. Y la obra de Alex Milla, en este espinoso terreno, es digno de resaltarse y subrayarse, pues día a día contribuye a fijar la memoria informativa de nuestra provincia, a templar su lenguaje y a consolidar su identidad, para que las generaciones venideras hallen a flor de tierra su historia y no tengan que hurgar en los insondables abismos del olvido. Por eso, en esta ocasión que me ofrece su onomástico, agradezco públicamente a Alex, por desarrollar su infatigable labor con una magnanimidad y continuidad poco frecuente en los acelerados momentos actuales.
Lima, 10 de junio de 2009
HOLA SHAY:
Cuando leo los mensajes y las fotograías que incorpora nuestro paisano ALEX MILLA CURI en las páginas electrónicas de la Internet, para mostrar al mundo las maravillas de 'Espejito del cielo', siento la tersura de la nívea piel del Huayhuash, y al mismo tiempo, el ímpetu del viento joven que acompaña su andar; pues su obra, en apariencia pequeña, tiene la grandeza del Yerupajá, la virginal belleza del entorno geográfico de nuestra tierra y el espíritu generoso de su gente.
Su trabajo, apuntando al desarrollo cultural de Bolognesi, da cuenta de manera cotidiana del quehacer laborioso del poblador que se faja parejo en el campo y la ciudad, con sus frentes bañadas de sudor y sus nobles corazones colmados de amistad telúrica; pero también, muchas veces dolido, por las hualancas que no faltan en el duro caminar del que construye con escasos recursos materiales, amplios peldaños de solidaridad, para que todos podamos subir la cuesta del progreso, como hermanos.
Coversando sobre la fecunda labor de Alex, me decía hace poco nuestra poeta y declamadora nacional Anatolia Aldave Reyes, que los homenajes a tiempo, aligeran las alas de los sueños e impulsan la obra del comunicador social. Obra que habitualmente recorre duros caminos, asfixiado por el centralismo que vive de espaldas al ande que le brinda sustento diario. Y la obra de Alex Milla, en este espinoso terreno, es digno de resaltarse y subrayarse, pues día a día contribuye a fijar la memoria informativa de nuestra provincia, a templar su lenguaje y a consolidar su identidad, para que las generaciones venideras hallen a flor de tierra su historia y no tengan que hurgar en los insondables abismos del olvido. Por eso, en esta ocasión que me ofrece su onomástico, agradezco públicamente a Alex, por desarrollar su infatigable labor con una magnanimidad y continuidad poco frecuente en los acelerados momentos actuales.
Como cabeza visible de ACUNOY y Presidente de AEPA-BOLOGNESI, Alex es un ser humano que vale no sólo por su trabajo en bien de la cultura bolognesina, sino también por el esfuerzo que despliega para unir a los niños y jóvenes en un noble propósito y proyectar sus creaciones poéticas, además de alejarlos de las garras del alcohol y de otras sustancias dañinas para la salud y la vida. Y en estos dos sentidos, nos ha dado más de una enseñanza, sobre todo en tiempos de individualismos y de tantas tareas pendientes para reactivar el amor por el estudio y la literatura.
Aprovecho la ocasión para saludar por su cumpleaños a doña LUZMILA GONZÁLES DE ROMERO, mamá de nuestro recordado amigo Alfredo 'Moshongo', quien apaga 92 velitas en el calor de su digno hogar. Del mismo modo a nuestro paisano GUDBERTO GUTIÉRREZ QUIROZ, excelente Maestro chiquiano, y según narra la 'leyenda', el mejor arquero del Tarapacá de todos los tiempos. .
Con mi mayor afecto,
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Nalo
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