AGUAS CALIENTES: "Una papa caliente"
Por Armando Alvarado Balarezo (Nalo)
El poblado de Aguas Calientes (1,700 m.s.n.m), llamado así por sus baños termales que fluyen del subsuelo, está ubicado en el distrito de Machupicchu, provincia de Urubamba, departamento del Cusco. 110 kilómetros lo separa de la Ciudad Imperial.
Poblado pintoresco que sirve de antesala al Santuario Histórico de Machupicchu (2230 m.s.n.m). Hasta aquí llegan los trenes con turistas nacionales y extranjeros, desde las estaciones de Cusco, Poroy y Ollantaytambo. Minibuses cubren el trayecto de Aguas Calientes a la Ciudadela de Machupicchu, en un viaje que dura 25 minutos aproximadamente (10.50 dólares americanos ida y vuelta). S/. 64.00 es el importe que pagamos los turistas nacionales adultos para ingresar a la Ciudadela.
Aguas Calientes cuenta con todos los servicios básicos para pernoctar sin contratiempos. Los alimentos, bebidas y hospedaje son más caros que en la ciudad del Cusco, "por el elevado costo del transporte ferroviario para trasladar los productos", comentan. Cuenta con un estupendo mercado de artesanías de la zona.
Imágenes del desastre - Municipalidad de Machupicchu
Los Incas construyeron la Ciudadela de Machupicchu en la parte alta de la montaña, sabedores que la furia de un río embravecido no se puede domesticar fácilmente. Por eso es mejor un pacto de lealtad, respeto y buena vecindad con la Naturaleza, interpretando cada día su lenguaje sonoro, pues cuando las aguas retumban sorpresivamente, el grito humano es desgarrador.
Urge un plan efectivo de contingencia, con monitoreo y supervisión permanente, máxime en estos meses de lluvia en la Sierra. Un plan que no solamente contemple sistemas de alerta y mapas de evacuación, sino el territorio adecuado para reubicar cuanto antes a la población de las áreas vulnerables; sin olvidar que a través del tiempo, esta zona también ha sido azotada por huaycos provenientes de las quebradas Alcamayo y Aguas Calientes que tributan sus aguas al río Urubamba (Vilcanota).
En suma, es de alta prioridad reforzar y mantener alerta la CULTURA DE PREVENCIÓN DE RIESGOS.
FUENTE:
- Armando Alvarado Romero
- Ronald Gamarra Cáceres "Qqosqoruna"
- Municipalidad de Machupicchu
- Blogspot CHIQUIÁN QUERIDO
- Blogspot CHIQUIÁN Y SUS AMIGOS
- SIDECI
AGUAS CALIENTES - 28 NOV 2010
Imágenes: Armando Alvarado Balarezo (Nalo)
Río Urubamba (Vilcanota)
Afluentes del Urubamba (Vilcanota), en el Poblado de Aguas Calientes
Poblado de Aguas Calientes
Por Armando Alvarado Balarezo (Nalo)
La negociación que se realiza bajo la mesa de concertación mundial, haciendo oídos sordos al clamor del planeta, es la más pérfida traición a la Madre Naturaleza y a sus especies más vulnerables, entre ellas el HOMBRE. Mientras tanto, la INDUSTRIALIZACIÓN, el principal causante, se jacta de su poder destructor y reta a la Pachamama, olvidándose que no existe poder humano capaz de hacerle frente cuando se enfurece y castiga sin piedad a ricos y pobres.
Lo ocurrido en Haití y Chile, son señales de auxilio que nos hace llegar la Madre Naturaleza para dejarla trabajar y producir tranquila en nuestro beneficio y de las futuras generaciones de seres vivientes. De continuar atacándola, nos hará sentir cada vez con mayor extensión y severidad su descontento.
El Perú es y seguirá siendo uno de los países más afectados: por la enorme cantidad de microclimas que posee y la pobreza que campea en la Amazonía, la franja costera y las altas cumbres. Como muestra un botón: Pastoruri, otrora glaciar emblemático del turismo ancashino, ha sido borrado de las guías.
Pero no solamente es responsabilidad de los gobernantes miopes que no ven más allá de sus calculados intereses, sino también del ser humano como individuo. Estas recomendaciones que navegan en Internet desde hace muchos años, son pañitos frescos para la frente sudorosa de la Madre Naturaleza:
( http://es.wikipedia.org/wiki/Calentamiento_global )
- Cambiar las bombillas tradicionales por otras de bajo consumo (compactas fluorescentes, o LED's). Las CFL, consumen 60% menos electricidad que una bombilla tradicional, con lo que este cambio reduciría la emisión de dióxido de carbono en 140 kilos al año.
- Poner el termostato con dos grados menos en invierno y dos grados más en verano. Ajustando la calefacción y el aire acondicionado se podrían ahorrar unos 900 kilos de dióxido de carbono al año.
- Evitar el uso del agua caliente. Se puede usar menos agua caliente instalando una ducha-teléfono de baja presión y lavando la ropa con agua fría o tibia.
- Utilizar un colgador/tendedero en vez de una secadora de ropa. Si se seca la ropa al aire libre la mitad del año, se reduce en 320 kilos la emisión de dióxido de carbono al año.
- Comprar productos de papel reciclado. La fabricación de papel reciclado consume entre 70% y 90% menos energía y evita que continúe la deforestación mundial.
- Comprar alimentos frescos. Producir comida congelada consume 10 veces más energía.
- Evitar comprar productos envasados. Si se reduce en un 10% la basura personal se puede ahorrar 540 kilos de dióxido de carbono al año.
- Utilizar menos los aparatos eléctricos; al menos, los encaminados exclusivamente al ocio. Desconectar los aparatos de radio, televisión, juegos, etc. a los que no se esté prestando atención en ese momento.
Elegir un vehículo de menor consumo. Un vehículo nuevo puede ahorrar 1360 kilos de dióxido de carbono al año si este rinde 2 kilómetros más por litro de combustible (lo mejor sería comprar un vehículo híbrido o con biocombustible).
- Conducir de forma eficiente: utilizando la marcha adecuada a la velocidad, no frenar ni acelerar bruscamente, y en general intentar mantener el número de revoluciones del motor tan bajo como sea posible.
- Evitar circular en horas punta.
- Usar menos el automóvil. Caminar, ir en bicicleta, compartir el vehículo y usar el transporte público. Reducir el uso del vehículo propio en 15 kilómetros semanales evita emitir 230 kilos de dióxido de carbono al año.
- Elegir una vivienda cerca del centro de trabajo o de educación de nuestros hijos.
- No viajar frecuentemente ni lejos por puro placer. Desde hace unos 20 años el hábito de viajar en avión se ha extendido de tal forma, y en ocasiones a precios tan bajos, que las emisiones de gases debidas a los aviones se han incrementado en más de un 200%.
- Revisar frecuentemente los neumáticos. Una presión correcta de los neumáticos mejora la tasa de consumo de combustible en hasta un 3%. Cada litro de gasolina ahorrado evita la emisión de tres kilos de dióxido de carbono.
- Plantar árboles. Una hectárea de árboles, elimina a lo largo de un año, la misma cantidad de dióxido de carbono que producen cuatro familias en ese mismo tiempo. Un solo árbol elimina una tonelada de dióxido de carbono a lo largo de su vida.[92]
- Exigir un certificado ambiental de edificios contribuye a la reducción de emisiones ya que se estima que el 50% del problema es originado por la construcción y funcionamiento de edificios y ciudades. Esto implica que al momento de adquirir o rentar una vivienda o edificio debemos exigir una certificación o etiquetado que indique el contenido energético del bien y el necesario para funcionar. De manera similar a la que ya se implementa en refrigeradores, motores eléctricos, lámparas eléctricas y otros.
Al pie, imágenes que nos pueden ayudar a reflexionar un poco más sobre los efectos inmediatos del CALENTAMIENTO GLOBAL:
AGUAS CALIENTES - CUSCO / PERÚ
Río Urubamba (Vilcanota) - Fines de enero e inicios de febrero 2010
www.travelpod.com/photos/
Beto Angulo
Lucy Martínez
Armando Alvarado Romero
Municipalidad de Machupicchu