Walter A. Vidal Tarazona
Digamos que octubre no es un mes más. Tiene muchos días guardamos como joyas en el baúl de la historia. Muchos de ellos nos recuerdan hechos de trascendencia, para este escribidor, para la región y para el país. Y para el Mundo, por cierto.
Vinieron a mi hogar dos hijos queridos de los tres que tengo: una el primer día y otro el último día. Pero para el mundo nacieron también varios personajes de importancia: políticos, científicos, músicos, así como escritores. El 2 de octubre de 1869 nació Gandhi, los siguientes días, Newton, Behair, Bohr; Pavarotti, Liszt, Strauss, Nietzsche, Oscar Wilde; premios nobel como Porter, Chadwick, y también el mismo creador del “Premio Nóbel” Alfred Nóbel. Como si estos nacimientos de célebres personajes fueran poca cosa, también en octubre se independizaron, o sea, nacieron como países libres de sus centros de dominación, entre ellos Irak, Noruega.
El 4 de octubre de 1957 se lanzó el primer Sputnik, El 8 de octubre, en el Combate de Angamos (1879) el honorable y genial Almirante D. Miguel Grau se inmoló para darle honor al país. Al rayar la aurora de aquel día, mediante una misiva se despide de su familia. Dijo y cumplió lo que dijo, que no regresaría si no es con el Huáscar.
el 12 de octubre de 1492 Colón descubrió América con lo cual empieza su explotación por los europeos. Casi terminando este singular mes, el 29 de octubre, se envía el primer mensaje por Internet.
Mención aparte merecen los hechos acaecidos este mes en el país. Octubre es denominado Mes Morado, en homenaje al Señor de los Milagros o también llamado Cristo de Pachacamilla, Señor de los Temblores o Cristo Morado, cuya sagrada imagen recorre, en hombros de sus cargadores y acompañado de un mar morado, masa compacta de fieles, que congrega a varios miles de personas. Si embargo dos años consecutivos, estos últimos, no hubo procesión, por esta mal nacida peste.
La historia nos relata que la imagen del Cristo de Pachacamilla fue pintada en una pared de adobe ubicada en el Altar Mayor del Santuario de las Nazarenas de Lima, por una mano morena, descendiente de Angola. Réplica de esta pintura es la que recorre las principales calles de la ciudad de Lima en el mes de octubre. Saliendo en hombres, come se ha dicho, del Santuario y Monasterio de Las Nazarenas.
Octubre, es también denominado tradicionalmente Mes de los Temblores. Este hecho telúrico está en la memoria de nuestra historia por fuertes terremotos ocurridos precisamente este mes. Llama la atención, aunque no fue octubre el mes del suceso, el siguiente hecho. La historia guarda como un hecho extraordinario, el ocurrido el 13 de noviembre de 1655 a las 14:45 horas, que estremeció Lima y Callao, derrumbándose templos, casonas y las viviendas frágiles, dejando miles de víctimas mortales y damnificados. Sin embargo, lo que llamó la atención de todos, fue que la pared simple de adobe, donde se encontraba el Cristo Morado, permaneció intacta. 32 años después de este terrible suceso sísmico, ocurrió otro, pero esta vez, en Arequipa.
En 1746 otro sismo destruye Lima y Callao, nuevamente; después de lo cual se sacó en procesión al Señor de los Milagros. Infinidad de sismos han ocurrido en el mes, el más reciente el del 3 de octubre de 1974, que alcanzó la cifra de 7.7° de magnitud.
Así es, pues, como vemos, octubre no es un mes más. Empieza con el Día del Periodista (1° Oct), en reconocimiento del “Diario de Lima”, primera publicación periodística impresa (1790), y termina (31 de Oct) con el Día de la Canción Criolla, conmemorando la muerte de Lucha Reyes.
En el ámbito geográfico de la Provincia de Antonio Raimondi, octubre es un mes de grandes acontecimientos para recordar y/o conmemorar. El hecho más importante ocurre el 26 de octubre de 1964, este día fue creada la Provincia sobre el mismo territorio montañoso del distrito de Llamellín, que de distrito pasó a ser provincia, cambiando de nombre de “Llamellín” por “Antonio Raimondi”. Ya el 31 de octubre de 1955 el diputado por Ancash Carlos Gonzales Loli había presentado a su Cámara el proyecto de ley de creación de dicha provincia, que recién fue firmada como Ley por el presidente Belaunde el referido 26 de octubre.
El 26 de octubre de 1890 murió Antonio Raimondi en San Pedro de Lloc, en casa de un entrañable amigo y paisano. En octubre de 1867 había iniciado su último largo viaje, de casi dos años de duración. Recorrió, palmo a palmo, principalmente el departamento de Ancash y otros más del norte.
La Provincia de Antonio Raimondi está situada en el regazo del ande ancashino, abrazada por Puchca y Marañón, por Pañoraqra y Shuncuy. Levantando su Pahuacoto hasta el cielo, heredó el ilustre nombre del sabio milanés. Sin embargo “Este pueblo era, como muchos pueblitos de la sierra, un lugar donde vivían solo niños y viejitos, porque los jóvenes se van a las ciudades grandes [decía el P. Jorge Nonni...para añadir luego] cuando yo llegué aquí la iglesia estaba destruyéndose”. Podríamos colegir que no solo la iglesia matriz,
sino la ciudad. Y no sólo en su aspecto físico, sino también el aspecto moral y espiritual del pueblo.
Lo anterior nos podría llevar a formular la siguiente pregunta: ¿La provincialización ha servido para superar esta situación de abandono?
WAVITA