viernes, 23 de enero de 2009

ANÉCDOTAS DE PALINCA: Tres al hilo

1

CON RAYA AL CENTRO
*
Cuentan que en la fiesta brava de 1952 un chiuchi se pasó caminando toda la corrida debajo de las palincas, viendo con los ojos desorbitados los bellos encantos de las musas de shuplac. A la mañana siguiente se encuentra en la calle de los mercachifles con una de sus víctimas, una oropuquina de mirada profunda, y éste se pone a tararear:

- Hay amarillo, amarillito porque te estarás amarilleando - La chica lo queda mirando y sigue su camino.

En la segunda corrida continúa su faena de observador electoral. Después de dos días se encuentra con la misma chica en una panadería y se pone a cantar risueño:

- Tarapaqueño soy, camisa verde bien de adentro soy, todos me odian todos me quieren porque soy campeón -cavilando y cavilando la linda oropuquina ata cabos: 'En la primera corrida estuve con truza amarilla y en la segunda con verde....ahhh', y colige que el chiuchi la ha ampayado en las dos corridas.

En lo que queda del año planifica su venganza y en la primera corrida del año siguiente va con una truza de tricolor: verde, rojo y negro. Al día siguiente (segunda corrida) ambos coinciden ingresando a la plaza de toros y él se pone a cantar mirándola:

- Quién te dio la cinta verde que te de la colorada, quien no te dio en la negra noche que te dé en la madrugada -la bella oropuquina al ver que su sesudo plan falló, se fue hablando entre dientes, y como hincha osada del equipo guairuro se quitó la truza al inicio de la corrida y esperó el desenlace parada en la palinca.

Al finalizar la corrida, cuando los carros están abandonando Jircán, ella busca al zapallo con la mirada y lo encuentra contemplándola a la distancia. Se le acerca contorneando el batán y le brinda una sonrisa con sorna. El chiuchi en respuesta le canta esta canción con sabor a orzuelo:

- Despeinada jaja jaja, despeinada jaja jaja....


2

CUANDO LA NECESIDAD TIENE CARA DE HEREJE
*

Después de la segunda corrida del 69, tres chiuchis maltones del barrio de Tranca se quedan en 'FA', y como era lógico, piensan satisfacer sus enanos instintos con una manoletilla bajo la sombra de un aliso. Para su buena suerte, cuando están atravesando el Coso, ven a un borrachito dormido junto a unos manojos de putpush en Cruz del olvido, por lo que deciden culminar la faena con una chicuelilla al paso...

De tanto chinguirito, el borrachito ni siquiera se percata de lo ocurrido. Concluida la quiñada múltiple, los chiuchis maltones se van a sus casas dejando en el ratash bolsillo del beodo un par de pencos. Al despertase el borrachito, ve con sorpresa el dinero y pensando que es un milagro de Santa Rosa, se va sonriente al mercado de abastos. Ya en uno de los puestos de comida, pide:
- Sírvame un caldo de mondongo, pero por favor no le eche rocoto, pues en el almuerzo el locro ha estado tan picante que hasta ahora me está ardiendo el *


3

'Shapra, fue un alquimista de la discreción, que hallaba su alborada en cada noche estrellada. Nuestro recordado amigo, comprometiendo las fibras más íntimas de su sentimiento, nos llevaba de la mano a un viaje mas allá de los límites de la amistad efímera y nos sumergía en un mundo hasta ahora poco conocido por el corazón humano, donde reina el verdadero amor por los demás: EL ESPÍRITU TELÚRICO. Comentan los viejos arrieros, que en 1941, Shapra gritó intentó cambiar cien iscariotes por un amigo, en plena procesión de Viernes Santo. Desde la otra vereda, el Indio Peruano le contestó, que ni mil serían suficientes... NAB - OCT 84'.


SHAPRITA EN LA RETINA
*

A fines de la década del cincuenta, funcionaban dos colegios secundarios en el 'Coronel Bolognesi' de Chiquián. Uno diurno para jóvenes y otro nocturno para adultos.

Cierta tarde de toros se encontraron dos viejas glorias bajo la palinca de las pallas. Uno de ellos estudiaba en la nocturna. El otro era Shaprita.
*
D I A L O G O

-¿Haber Shapra, dime quién es Fedor Mijáilovich Dostievski?

- Pues, no sé quién será.

- ¡Qué tonto eres!, deberías ir a la Nocturna.

En la segunda corrida se encuentran caminando asustados cerca del Coso y le hace otra pregunta:

- ¿Y sabes quién es Alex Hrdlicka?

- Pues... no sé...

- ¡Qué tonto eres!, deberías matricularte en la Nocturna.

Pasa una semana y le hace una nueva pregunta :

- ¿Sabes quién es Friedrich Engels?

- Pues... no sé...

- ¡Qué opa eres!, deberías ir a la Nocturna.

Entonces Shapra, harto de tantas preguntas, le dice:

- Y tú, ¿sabes quién es Manuel Ñato Allauca?

- Pues, la verdad no sé Shaprita.

- ¡Qué tonto eres!, es el tipo que se acuesta con tu costilla, cuando vas a la Nocturna.

Al escuchar ésto, el astado empezó a sudar frío y sin decir ni MUUU, caminó con la cabeza gacha arando el piso hasta Tranca. Ya cuando se aprestaba a lanzarse al abismo de Shapash, Shaprita le grita:

- !Cuidadooooo¡, tu gila te ha puesto cuernos, no alas...

Fuente:

Tertulias chiquianas de agosto fiestero - Recopilado por Nalo Alvarado Balarezo