miércoles, 23 de diciembre de 2020

NUBE, BELLEZA Y MISTERIO - POR ELVIA BENAVENTE ÁLVAREZ (PALLASCA)

 


NUBE, BELLEZA Y MISTERIO

Elvia Benavente Álvarez

Una tarde contemplaba lo bello de La Naturaleza, el cielo azul con nubes blancas, preciosas y transparentes, esta belleza me inspiró a dar rienda suelta a mis pensamientos. Precisamente pensaba en el significado de una maravillosa palabra: “TIEMPO”. El que llevo aquí en la Tierra, me encantaría dialogar este tema importante y filosófico con alguien que tuviera el mismo sentido e interés; pero no es fácil encontrarlo. Por eso paso horas pensando, y un sin número de preguntas vienen a mi mente. Al final, difícil de encontrar respuesta a todas ellas, muchas veces saco algunas conclusiones favorables a mis pensamientos, claro está. Ahora dos preguntas interesantes: ¿Quién soy y qué hago aquí?. Realmente no lo sé, creo y pienso saberlo, que estoy aquí por alguna buena razón o propósito. Pero de esto, ¿Quién sabe?. Y allí, pensando... De pronto escuché algo extraño, un ruido, parecía escuchar voces y tranquilamente me pregunté: ¿Qué es?, ¿Qué raro?, ¿Es acaso mi imaginación o parte de mi otro Yo?. No lo sé, el hecho es que escuché una voz, que decía:

_ “¿En qué piensas?. Te noto muy atenta. ¿Acaso soñando en algún planeta? ¿Andas por las nubes o pensando en las musarañas?... Ja, ja, ja. Bueno, tú sabes mejor que yo a lo que me refiero, ¿verdad?”.

Claro que sí, estoy aquí observando el panorama, mejor dicho el Universo y conversaba conmigo misma, haciéndome preguntas, tratando de analizarlas. Y bueno, me decía, partiré algún día sin saber si regreso o no. Pues bien, contemplo todo y lo encuentro bello. Pienso y me doy cuenta de muchas cosas. Que uno nace, crece y muere al igual que las aves, las plantas, los animales y demás especies. Y dicen que hasta las piedras hablan y enseñan, será cierto...? Según el cantante mexicano Vicente Fernández en su canción “El Rey” dice: "Una piedra en el camino/ me enseñó que mi destino/ era rodar y rodar/". Perdón, disculpa yo como siempre con mis ocurrencias, ¿verdad?. Bueno, sabiendo que estoy aquí en la Tierra por tiempo limitado, debo ir pensando, por si acaso regreso, ¿No crees...?

_ “Pues bien, escucha, no te preocupes por nada. Será lo que será. Lo que tiene que ser. Mientras tanto tú sigue adelante: Viaja, ríe, canta, escribe comparte tus sentimientos con los demás y ya verás que todo irá bien. Además me gusta el sentido de humor que tienes, hasta me haces reír: Ja, ja, ja. Ahora tú, dime, si tuvieras la opción de regresar ¿Qué te gustaría ser...?”

Buena pregunta, a mí me encantaría ser como una nube.

_ “Y, eso ¿porqué, precisamente nube?” 
 
Sí, nubecilla por la simple razón de que vengo observándolas desde hace mucho y aunque parezca mentira, pero así es. Son bellas, no tienen límites; van formándose pequeñitas al juntarse con otras crecen enormes, son libres, van y vienen de aquí para allá; algunas veces cambian de color plomizo claro a oscuro, parecen estar melancólicas y deciden llorar en cualquier momento; también cuando ven los campos secos se apenan, quieren verlos frescos, verdes y floreados, durante incendios terminan con ellos. De vez en cuando el arco iris se hace presente para saludarlas, premiarlas o quizás para llamarles la atención, eso sí no sé... ¡Qué bello! ¿Verdad?.

_ “Bueno. Sí, en todo esto, estoy contigo, tienes toda la razón. Ahora bien, debo irme pronto, ya que alguien más me necesita. Te deseo toda la suerte que mereces...”

Sin escuchar nada más quedé allí. Tranquila, sola y feliz, en mi mundo de ensueño. ¿Qué les parece? ¡Buena idea!. A mi parecer el escribir, es una buena terapia para entretenerse y sobre todo para ejercitar la mente. Ahora bien, ustedes pensarán o se imaginan quizás que me estoy fumando algo raro...Pero bueno, me tiene sin cuidado como piensen, la verdad es que ni siquiera fumo. ¿Se imaginan?... Ja, ja, ja.

Antes de terminar con esta imaginación, tengo algo importante y quiero que ustedes participen cantando conmigo, aquél vals peruano del maestro Eduardo Márquez Talledo “NUBE GRIS”: Si me alejo de ti/ es porque he comprendido/ que soy la nube gris que nubla tu camino/. Me voy para dejar que cambie tu destino/ que seas muy feliz, mientras yo busco olvido/. ¡Precioso!. Lo canté muchas veces allá por el año sesenta, dos años antes de realizar mi viaje rumbo al mundo de “Ilusión y fantasía”. Y ahora, ¿Dónde se fueron los años...?.

Al recordar y pensar detenidamente en las líricas de esta bella canción, me parece encontrarme o mejor dicho identificarme con ellas; en cuanto al recuerdo de mi inolvidable pasado. Muchas gracias, maestro. Descansa en Paz y que viva el Callao.

Y la vida sigue, sigue como el tic, tac del reloj. Como el TIEMPO que no se detiene y que a la vez se encarga de todo. Pero claro que cuando regrese convertida en NUBE, todo será diferente ya lo verán y eso se los digo yo: “Con la pura y neta verdad”... Y, ¿cuándo será el momento de partir...? “Who knows”... Por ahora será mejor dejar todo aquí. Les parece. ¡Ah!, pero antes de cerrar tengo algo muy interesante, se trata de una fotografía tomada al norte de California en Septiembre 1981. Pienso que fue la casualidad precisa del momento. ¡Maravilloso!, regalo, difícil de explicar, donde encuentro realizados: El presente, el pasado y el futuro.

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ELVIA: Autora de: “Hablaré con la pura y neta verdad” en homenaje al poeta César Calvo Soriano (1940-2000). “Rastros y Rostros”, vivencias y relatos experimentados personalmente como son: El inolvidable pino, El pelícano solitario y Catalino Lino. Pienso estos relatos influyeron en mí, debido a todo esto escribo, como tal. Pueda más tarde regrése convertida en algo tan maravilloso, como son las nubes. Y eso que no sé mucho de ellas, pero realmente me fascinan.

Orlando, Florida - Enero 2014 – Noviembre 2015