domingo, 31 de mayo de 2020

TERREMOTO EN ÁNCASH: 31 DE MAYO DE 1970 - POR JUAN RODRÍGUEZ JARA (PISCOBAMBA)

 
TERREMOTO EN ÁNCASH:
 
31 DE MAYO DE 1970

Allá estaban los nevados
regalando sus lágrimas a ríos,
alegres se recogían los cóndores,
los gallos buscaban sus lechos;
el sol viajaba buscando sus noches.

Fue una tarde, alegre de domingo
jornadas de fútbol México setenta
por allí los perros aullaban en coro
las aves se inquietaban en grupo
las tres de la tarde estaba señalada.

Minutos vienen y van en suspiros
se dibuja en la tierra sangre y muertes,
gritos y reclamos levantando polvos.
Las manos agarran a sus muertos
y las cordilleras se agitan mudas.

Minutos largos y la tierra nos traga
explota la Pacha Mama enojada;
llaman a la muerte estando atrapada
salvamento se agota, falla la fuerza,
y todos los pueblos lloran en retirada

En polvo los tejados y paredes
entierran los corazones y almas.
La nube densa y polvorienta
nos niega el cielo oración nuestra,
al suelo herido todos arañamos.

Enterrados todos los rincones vivos,
al ver la cordillera su herida se asombra
Taita Dios se olvidó de sus pueblos,
Callejón de Huaylas se ha marchado
con sus encantos se ha enterrado.

Yungay hermosura fue sepultada
por el nevado Huascarán celoso,
para que nadie vea sus heridas
convirtiendo en cementerio mudo,
con sus cinco mil rosas en agonía.

Juan Rodriguez Jara.