. .
A MAMÁ
Norka Brios Ramos
Flor de capulí, aurora del amanecer
te solía llamar papá,
por tu mirada dulce y amorosa,
por tu sonrisa angelical.
Tenías la ternura de un ángel,
tus brazos listos para cobijar
a tus seres queridos.
Norka Brios Ramos
Flor de capulí, aurora del amanecer
te solía llamar papá,
por tu mirada dulce y amorosa,
por tu sonrisa angelical.
Tenías la ternura de un ángel,
tus brazos listos para cobijar
a tus seres queridos.
Fue tu cantar melodioso
cual trino de gorrión ancashino
para acunar a tus hijos.
Eras antorcha de llama ardiente
que siempre guió y alumbró
mi vida que recuerdo
en los momentos difíciles.
Eras antorcha de llama ardiente
que siempre guió y alumbró
mi vida que recuerdo
en los momentos difíciles.
Fuiste nuestra luz de esperanza
amaste con el corazón.
Con tu mirada tierna y clara
nos hiciste creer en la vida.
De voluntad férrea como el acero
porque para ti no había imposibles.
MAMÁ, siempre te recuerdo y
te llevo en el corazón;
sé que estás conmigo,
cada mañana te veo al despertar
con la aurora del amanecer.
MADRE MAESTRA, forjadora de valores
tu himno fue al amor, a la vida
a la justicia y a la libertad.
Especialmente hoy, al recordarte,
vuelvo a ser niña, y las lágrimas
humedecen mis ojos por tu ausencia.
Te digo FELIZ DÍA MAMÁ, de mi corazón.
Gracias por tu poema mamá
me llamabas mi pequeña colibrí
porque me dejaste volar a mi antojo.
Gracias por alimentarme con el néctar de la vida
Gracias por darme abrigo y velar mis sueños.
Gracias por cuidar de mi infancia.
Gracias por ser complice de mis travesuras...
Gracias por tus enseñanzas y consejos,
por tus caricias y tus besos.
Gracias por ser mi MAMÁ. .