jueves, 24 de diciembre de 2015

DOMINICAL DE ÁNCASH - SUPLEMENTO ESPECIAL POR NAVIDAD: BIENVENIDO NIÑO JESÚS



 SUPLEMENTO ESPECIAL POR NAVIDAD
 
BIENVENIDO NIÑO JESÚS

Desde hace mucho tiempo, la Estrella de David se detendrá, no solo en Belén, sino en todo el mundo cristiano anunciando la llegada del Niño Dios; no en una cuna dorada, sino en un humilde pesebre, para enseñar a los hombres a ser nobles de corazón.

Aquí en Huaraz, hasta hace medio siglo atrás, a esta representación del nacimiento del Redentor, se llamaba, “Nacimiento del Niño Mañuquito”, un término andinisado para identificar a los pobres.

Nunca, el niño de los años 40 se imaginaba que llegaría con el tiempo un hombre barbón, de vestido rojo jalando un trineo y llamado Papá Noel y lo peor caminando sobre la nieve, cuando aquí, la nieve está en las partes altas de la Cordillera, a donde el visitante extranjero no podría llegar ni en broma.
Y ese personaje que huele a mercachifle, está desplazando a Mañuquito, nuestro Dios, Redentor y Benefactor de los humildes y desposeídos.

Bienvenido niño Dios, imprégnate en los corazones nuevamente y haz comprender que has venido a redimir a los hombres y que ante ti, todos somos iguales.

¡Feliz Navidad con Niño Mañuquito!...

REDACCIÓN.

  
Que en estas fiestas puedas ver y compartir las cosas más valiosas de la vida, que son gratuitas.
 
Que sientas que la  verdad,  el bien  y la belleza son necesarios para unir a todos los seres vivos, y que el delicioso ingrediente del amor  renazca en tu corazón en este diciembre y sea lo que  deleite tu hogar con alegría y prosperidad.   
 
¡Felices Fiestas!
 
Lucy Martínez Zuzunaga



Les deseo con mucho afecto y aprecio unas maravillosas fiestas de fin de año, deseándoles a ustedes y a sus bellas familias lo mejor del mundo en el 2016 y siempre…

Poeta JOSÉ BELTRÁN PEÑA


EL ÁRBOL DE NAVIDAD
 
Autor Anónimo
 
 Yo quiero en esta Navidad
Poder armar un árbol
Dentro de mi corazón
Y en él poder colgar, en lugar de regalos
los nombres de mis amigos
Los que viven lejos…
Y los que viven cerca.
Los antiguos
Y los más recientes.
Los que veo todos los días
Los que raras veces veo.
Y los que algún día quisiera ver.
Los que siempre recuerdo…
Y los que siempre olvido…
Los de las horas difíciles
Y los de las horas felices…
Los que sin querer herí…
Y los que sin querer me hirieron.
Aquellos que conozco profundamente…
Y aquellos que poco conozco.
Mis amigos humildes…
Y mis amigos importantes.
Los que me enseñaron
Y los que tal vez, aprendieron un poquito de mí.
Quiero que este árbol tenga raíces profundas
Pero que los nombres de mis amigos
Nunca sean arrancados de mi corazón
Y que sus ramas se extiendan
Para agregar nuevos nombres
Que venidos de todas partes
Se junten con los existentes.
Un árbol de sombra agradable…
Para que nuestra amistad
Sea un momento de reposo
en la lucha diaria de la vida.
Quiero que el espíritu de la Navidad haga
De cada deseo una flor
De cada lágrima una sonrisa
De cada dolor una estrella
Y de cada corazón una dulce morada
Paz en la Tierra
Bienaventurados sean ustedes…
¡Que pasen una feliz Navidad!
¡Que Dios los bendiga! 
 
Autor Anónimo

Cortesía: LUIS IDELSO ALBITRES MENDO


ESTIMADOS AMIGOS, COMPAÑERAS, TODOS: 
 
QUE LA GRACIA DE DIOS LOS COLME DE BENDICIONES EN ESTA NAVIDAD, RECIBAN USTEDES UN FUERTE ABRAZO Y QUE EL AÑO NUEVO 2016 Y LOS QUE VENGAN, SEAN BASTANTE POSITIVOS PARA TODA SU FAMILIA.

FELIZ NAVIDAD

MUY ATENTAMENTE 
 
SANTIAGO SOTO


El tercer jueves de cada mes nos reunimos en el CENTRO CULTURAL CENTENARIO los integrantes de IFLAC para tratar de cumplir las metas trazadas, éste jueves 17 de diciembre del 2015, quedará marcado entre nuestros más bellos recuerdos, cómo un grupo de destacadas personalidades haciendo un alto a sus tareas cotidianas nos reunimos en una noche de camaradería, cultura, para exteriorizar nuestros más puros sentimientos y ratificar el compromiso de seguir trabajando en busca de la paz mediante el amor, la educación, el arte y la cultura en general. Como Director de IFLAC en el Perú hice un recuento de la labor realizada durante el año que fenece 2015, ante la presencia de personalidades de reconocido prestigio internacional como las doctoras María Victoria Márquez Alcalde, Delegada de IFLAC Región Lima;  Aury Yovera Sobrino, Delegada de IFLAC Piura – Sullana y Pueblo Libre (Lima), que haciendo un esfuerzo no sólo económico, sino físico, llegar de Lima a las 5 p.m. para retornar a las 12 del mismo día; Víctor Hugo Alvítez Moncada, Delegado IFLAC Cajamarca – San Miguel; Ing. César Azañedo Díaz, Delegado IFLAC Ancash; Delegados IFLAC Chimbote: Silvia Diestra Pastor, Luzmila Bocanegra Catalán, Elizabeth Rodríguez Acevedo, Wálter Estrada Príncipe, Bulili Alvarez Cueva, José Gonzales Villegas, Ing. Leoncio Hermilio Romero Ponte, Christian Becerra Saavedra, Irene Arias Romero; invitados que se han sumado a este Foro Internacional como: Gaspar Lozano Torres, Ing. José Morales Ramírez, Diógenes Benites Vejarano, Gino Minaya Medina, Leonel Hans Estrada, W. Leonardo Estrada, Kristel Estrada, Carlos Bastiand Granados, Andrés Torres Parodi, Edwin Carhuallano Vásquez; la presencia del Ing. Rolando Lucio, que arribó de Barcelona (España), entre otros; que con sus intervenciones, dieron un digno marco a este compartir navideño en el que primó la AMISTAD.

FELIZ NAVIDAD Y UN VENTUROSO AÑO 2016.
     
VÍCTOR UNYÉN BELESMORO



Que Jesús ilumine con su luz tu camino para que alcances todos tus sueños.

¡Feliz Navidad!

MAVI MÁRQUEZ A. 


 
FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO 2016
   
Ing. BENJAMÍN MORALES ARNAO
 
Presidente Ejecutivo

 
Barrio de Nicrupampa - Huaraz
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NAVIDAD EN HUARAZ
 
 Por Armando Alvarado Balarezo (Nalo)
 
 "¿Quieres llevarte más de una sorpresa?:
Observa a los que dan con bombos y platillos.
 Nunca pierdas de vista a los que rezan gritando". 
                                                              Shapra
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La noche anterior llovió a cántaros en el Callejón de Huaylas, pero a la mañana siguiente, sábado 24 de diciembre de 1983, el cielo de Punta Callán amaneció tan azul como el cielo de Capillapunta. Ni una hilacha de nube pendía en el firmamento. En el horizonte el bicéfalo Huascarán nos regalaba todo su esplendor con los primeros rayos del sol ancashino.*
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A las once de la mañana salí rumbo a una escuelita de Nicrupampa, donde los alumnos escenificarían la Navidad. Cinco días antes, Dana, una linda  profesorita natural de Huarmey me había invitado, y de ninguna manera podía faltar a la cita con sus alumnos, a quienes conocí el 28 de julio, cuando fui padrino de implementos deportivos durante un campeonato infantil de fútbol en el estadio Rosas Pampa. Caminé por Luzuriaga, luego Fitzcarrald, pasé el puente Quilcay y ascendí hasta la escuelita, arribando cuando ingresaban los niños con sus padres.

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Al mediodía empezó la función. Un rumor trémulo se cernía en el ambiente, pues los hijos de los que colmaban el auditórium con piso de tierra eran los actores.


* * *


Empezó la Primera Parte de la obra de teatro 
San José preguntó: 
- ¿Podría darnos hospicio, por favor?, mi esposa está por dar a luz.
- No hay espacio en este albergue, busquen otro lugar -respondió el pastor, y se quedó contemplándolos con tristeza mientras se alejaban.
De pronto, y fuera de libreto, el niño actor gritó acercándose a la pareja:
- ¡Esperen, esperen, los llevaré a mi casa!
Al escuchar estas palabras, Dana salió nerviosa al escenario y pidió disculpas. Para su asombro, todos los asistentes nos pusimos de pie y aplaudimos las emocionadas palabras del niño actor, quien llevado por su noble corazón alteró la historia del Nacimiento de Jesús, que había ensayado durante dos meses con su profesora y compañeros.
No guardo en mis recuerdos recientes una Navidad tan bella como la vivida aquel 24 de diciembre en el barrio de Nicrupampa, de Huaraz. 
FortLauderdale DIC 1995


Huaraz de noche


  
 



MISA DE GALLO

Danilo Sánchez Lihón
1.-Un coro de niños

– ¡Ya van a ser las doce y ustedes ni se lavan ni se peinan!
– Yo sí ya me lavé, mamá.
– ¿Cuándo? ¿A qué hora que no te he visto?
– Temprano, en la mañana, tan pronto me levanté.
– ¿Qué? ¿Y crees que desde esa hora no hay que volverse a lavar? ¿Acaso crees que vas a la iglesia que es un lugar sagrado, con esa cara?
– ¿Qué tiene mi cara, mamá? 
– Que está sudorosa. Has jugado todo el día.
– ¿Y con este frío, mamá, he de volver a lavarme? ¿Y todavía con agua helada?
– ¡Sí! Porque al Niño Dios no le gustan muchachos desaseados.
– Si ni siquiera nace todavía.
– Dios nos está mirando siempre.
 
2. Rezos y oraciones
 
– ¡Ya, ves! ¡Qué buen mozo se te ve! ¡Ya vamos! Tenemos que estar desde el principio de la misa, porque es falta de respeto a Dios llegar a su templo a la hora en punto. Y peor llegar tarde, como si nosotros fuéramos los principales o las autoridades. ¡Tenemos que tener más respeto a Dios!
– Mamá: y es falta de cariño al Niño estar tan regañona justo el día en que él nace, ¿no?

Felizmente ya llegamos a la iglesia toda la familia y hemos pasado adelante no sabemos cómo. Y es más, detrás ha llegado una silleta para que mamá se siente. Es una algarabía de voces, ruegos y alabanzas las que se elevan, rezos y oraciones que se confunden con el balido de corderos y chivillos, graznido de patos, aleteo de perdices, cacareo de gallinas.

Hasta de silbidos de vizcachas cogidas seguramente mientras se encontraban durmiendo en lo alto de alguna roca en la jalca que son tierras del común. Y que no apagan los ronquidos de un verraco que se ha quedado dormido en los brazos de un chiquillo, ni los graznidos de las grullas que se han despertado al deslumbrarse sus párpados con tantas luces y sus tímpanos con tantas voces y sonidos.
 
3. Indesmayable esperanza
 
Ahora rompen a cantar ya no las pastoras y labriegos, que entonan sus coplas desde atrás, sino un coro de niños y niñas que junto al pesebre elevan sus voces a los altares.
Allí están esas niñas cristalinas como el agua que baja de las alturas y se precipita por las acequias alrededor de los campos sembrados.

Con el cabello como espigas fragantes de trigo repartido en dos trenzas con una línea límpida en el centro. Con la mirada lenta de sus ojos como la neblina que se posa misteriosa debajo de los aleros extendidos, mientras cantan:

Esta noche nació el niño
entre las pajas y el heno
quién pudiera niño mío
vestirte de terciopelo...

La iglesia es un estallido de luces, de coplas, de tonadas del conjunto de las hermandades y de los barrios del pueblo. Y de cientos de pastores y pastoras que han bajado, subido o llegado de los caseríos y poblados aledaños.
 
4. Una mantita morada
 
Todos expresan con sus voces inocentes, con miradas y gestos, y hasta con el modo de estarse de pie o sentados, su cariño profundo a una fe, de aferrarse a una ilusión y hasta a una utopía.

También nos dicen sus fervores, ensueños y anhelos de una vida nueva; de indesmayable esperanza que a veces no se hace manifiesta sino que se da a entender en el brillo de luz de tantos ojos ingenuos y amorosos.

De allí que por lo alto y desde el fondo lleguen hasta el altar del Niño Dios, que es un pesebre hecho de gavillas de cebada y trigo cortados de alguna chacra cercana, canastas con manzanas, petacas repletas de huevos y alfajores.

Otros son azafates con humitas y tamales verdes, vasijas bordeando leche de cabra y hasta porongos de chicha. Todo es una algarabía de voces y cantares que dicen:

Aquí te traigo María
esta ovejita lanada
para que le tejas al niño
una mantita morada...

5. El camino de regreso
 
¡Y todo lo ofrecen al Niño Dios con manos generosas, anhelando el bien de todos y paz sobre la tierra a los hombres de buena voluntad!

Que es cuando yo me voy quedando dormido.

Y lo hago justo cuando está terminando la ceremonia y se dará inicio al camino de regreso a casa, que son varias cuadras de calles empinadas.

Si no fuera La Noche Buena y víspera de Navidad ya me pellizcarían despiadados para que, ¡qué buena laya!, despierte y camine. 

Pero esta vez, mis primas jóvenes y casaderas les ruegan a mis padres que no me despierten, ¡que ellas me van a cargar!

¡Que pobrecito, que debo estar cansado y rendido! 

¡Que tanto he correteado! 

Que no me sigan jalonándome las mangas ni sacudiéndome de los hombros para que camine. 
 
6. Poniendo sobre la mesa
 
Y ahí nomás es que sus brazos me alzan y acurrucan. Y siento la agitación de sus pechos en flor.

Y la palpitación acelerada de sus corazones, porque se turnan para hacerme llegar hasta la casa mirando dónde ponen los pies por esas calles abruptas.

Pero ya en ella, al sentir que se enciende la candela y se alegra la cocina, y antes de que puedan acostarme en la cama, repentinamente me sacudo, despabilo y despierto.

Porque además de ponche de chocolate, hay tajadas y alfajores.
Porque siento el olor de los bizcochos de Chancay y del pan de yema que van poniendo sobre la mesa.

De las basitas y de las roscas nevadas de espuma blanca. Además que temprano vi que mamá hervía jamón y hacía mazamorra de chiclayo.

¡Y, sobre todo, siento que habrá relatos de apariciones del Niño Dios en los caminos!
 
7. En el año venidero
 
Y de milagros que nos hace, incluso sin levantarse de su pesebre. De hallazgos y visiones que tienen “Las pastoras” ya de regreso a sus comarcas. Rumbo a sus cabañas esparcidas por quebradas y colinas, cumbres y bajíos; o bien dentro o arrimadas a un boscaje, o junto a la corriente de un río; o bien en pleno viento y expuestas al aguacero en la saliente de un promontorio.

De cómo lo encuentran al Niño Dios convertido en luces cercanas o en estrellas que titilan en lontananza. En aromas inusitados o en susurros imprevistos e inigualables por hondos y tiernos. Sin saber que más se lo encuentra en las risas de contento porque lo han adorado este año. Y que ojalá la vida alcance para poder hacerlo en el año venidero.

Y que es cuando me pregunto y pienso, ¿qué es la Navidad? Y creo que es vivir dejando que aflore en las cosas más sencillas, y desde el fondo de nuestros corazones, lo mejor de nosotros mismos, como es el bien, la ternura y la honda alegría, convencidos de que este universo es firme y seguro porque lo conduce la mano sabia de un niño que es Dios.