ESTAMPA DEL MES DE ABRIL - POR DANILO SÁNCHEZ LIHÓN

 

CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA

Construcción y forja de la utopía andina

 

2014 AÑO

DE LA BATALLA DE LA LECTURA Y

ESCRITURA POR LA CONSTRUCCIÓN

DE UN MUNDO MEJOR

 

ABRIL, MES DE LA PALABRA,

LA CREATIVIDAD LITERARIA E

INMORTALIDAD DE CÉSAR VALLEJO

 

CAPULÍ ES

PODER CHUCO

 

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RECIBIMIENTO DEL PUEBLO DE SANTIAGO DE CHUCO

A LAS DELEGACIONES VISITANTES DEL XV ENCUENTRO

INTERNACIONAL CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA,

EL DÍA 23 DE MAYO

 

 

El pueblo de Santiago de Chuco, cuna del poeta César Vallejo, se vuelca a las calles a recibir y dar su saludo fervoroso de bienvenida a las delegaciones visitantes del Perú y de diversos países del mundo, en cada encuentro que realiza el movimiento cultural Capulí, Vallejo y su Tierra  cuyas raíces y pertenencia corresponde a dicho pueblo, la tierra de Vallejo

 

Puede revisarse en YouTube el recibimiento que el año pasado, 2013, se tributó al contingente de peregrinos que llegaron formando parte de las delegaciones asistentes. Es importante para quienes esperan saber acoger, como para quienes llegan hacer que este hecho adquiera significación y trascendencia.

 

Por tales razones, solicitamos a los representantes de los países hermanos, como a las asistentes nacionales portar sus banderas grandes, desplegadas, agitadas al viento, hechos que se registran en las imágenes que se toman y en los videos que luego se difunden; así como traer doblada en tu equipaje una pancartas con el nombre de los lugares de procedencia, así como banderolas con el nombre de las instituciones.

 

¿Cuál es el fin? Sentirnos hermanados, identificados unos con otros pero expresando esto soy y lo junto al torrente de una humanidad unida y total que lo convoca un poeta, no una empresa comercial ni un político. Para ello se han designado secciones de alumnos que acompañarán a los visitantes para ayuda a portar tales emblemas que señalan identidades, países, ciudades del mundo, provincias, departamentos como de las instituciones que asumimos como nuestras.

 

Hagamos de este certamen la fiesta de la fraternidad americana y mundial en el pueblo del poeta que es el símbolo de la solidaridad humana y universal. ¡Viva Santiago de Chuco! ¡Viva el mundo andino! ¡Viva la solidaridad humana!

 

 

 

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25 DE ABRIL

EL HABLAR

DE LA CANDELA

 

 

ESTAMPA

DEL MES

DE ABRIL

 

 

FOLIOS

DE LA

UTOPÍA

 

 

 

FLORES

DE

ABRIL

 

 

Danilo Sánchez Lihón

 

 

El dondiego de día que florece en mi

ventana

me satisface más que toda la metafísica

de los libros.

Walt Whitman

 

1. Dulce

y transido

 

En abril en la serranía del mundo andino se roturan los campos húmedos por las lluvias caídas en los meses de enero, febrero y marzo, y brotan las flores en las colinas y en las cañadas como en lo alto de las rocas y hasta entre las piedras y los abrojos.

 

Me he extasiado ante muchas flores, pero las que más admiro y quiero son la de los cactus porque es increíble cómo plantas tan aparentemente hoscas alberguen en su fondo notas de suprema e infinita ternura.

 

Sin embargo, en cuanto a flores he visto presencias inolvidables en mi vida y todas ellas en mi tierra nativa, tanto que permanecen indelebles en mi alma y estarán nítidas en el momento en que muera.

 

Porque a ellas me aferro para no rodar al vacío en los remezones que nos da la vida, y de todas estas vivencias que guardo todas ellas son visiones vinculadas al mes de abril, fecundo e íntimo, dulce y transido en que la vida tierna renace y con ella otra vez los encantos y las ilusiones.

 

2. Por ser

lo que es

 

Una de aquellas visiones es la de la flor de la pitajaya que la contemplé de niño arrobado al salir de un cañón denominado Mal Paso, viniendo del fundo de Pasabalda que fue de mis ancestros, con el trasfondo de las peñas, el cascajo y la arenisca que allí rueda y se precipita al fondo de la cañada.

 

Me pareció increíble que pudiera subsistir en aquel sitio una flor tan primorosa, de colores vivos y estallantes como si se quisiera poner una mancha de roja pasión a lo pardo e inerte del paisaje y proveniente de una planta arisca, cerril y espinosa.

 

Hay flores de la pitahaya que son blancas, pero esta era de intenso escarlata, envuelta en sí misma, como si quisiera arropar hacia adentro de sí algo muy íntimo, aunque la flor flameaba en lo más alto de la planta ante la cual se siente que a la vez la inspiran el dolor y fortaleza, fortaleza por crecer donde crece y por ser lo que es.

 

3. Blanco

azuladas

 

Otra es la flor de la planta de la cahua. O ramillete de flores en verdad, dado que toda la planta se convierte en un árbol gigantesco que florece, ofreciéndose una sola vez, y ya para morir.

 

Considerando que la cahua vive 100 años y tiene la inflorescencia más grande de entre todas las especies vegetales.

 

Este proceso de echar flor que le dura 9 meses, como es el tiempo que alcanza a tener de gestación una criatura en el vientre de una mujer. 

 

Para tal ocasión la cahua se cubre de miles de flores blanco azuladas y cremas que puede alcanzar, en cuanto a tamaño, aproximadamente la altura de diez metros de flores níveas delineándose en el cielo azul.

 

4. ¡Oh,

prodigio!

 

Es la cahua una de las plantas más raras y exóticas, porque se erige en lugares solitarios y pedregosos, pareciendo aspirar solo el de llegar al infinito. 

 

Y de estar enamoradas nada más que de los absolutos del espacio sideral, de tal modo que hacen una hilera interminable siempre hacia las cumbres. 

 

Lo conmovedor es que han guardado en su entraña palpitante y en silencio durante 100 años sus flores para ofrecerlas solo antes de morir, navegando en su savia nutricia esta flor para en el momento de fenecer darla a luz y ofrendarse a los cuatro vientos.

 

Qué visión esta, la de los campos cubiertos de flores de cahua de mi tierra natal ascendiendo por los terrenos pedregosos. 

 

¡Oh, prodigio! ¡Oh, embeleso! Los breñales y praderas, todas cubiertas de flores. Como estas en cuya mata se posa el arco iris, como en otras toda la gama de los colores cohesionadas en sus pétalos.

 

5. Caen

de pie

 

Así, el morado intenso en los arrayanes, el azul espliego en las orquídeas, el rojo bandera en las buganvillas, el bermellón en las cantutas.

 

Las margaritas cubren los campos de blancos, amarillos y rojos, como también se expanden al borde de las acequias.

 

Los sunchos sobresalen y se imponen porque son más granates y anaranjados.

 

Esas otras flores que llamamos zapatitos semejan pequeñísimos calzados de duendecillos diminutos de los bosques, que quizá deben su nombre también a que se cogen, se sueltan y siempre caen de pie. 

 

Las “rompeollas”, los cadillos, las huaraillas y cortaderas son plantas que tienen flores y estas llevan sus nombres. La flor del cardo santo como símbolo de lo que es fugaz y es eterno.

 

6. El agua

fresca

 

Y entre todas ellas, en el centro de la explanada de algunos patios, expuestas a todo y expuestas a nada, la flor del floripondio alucinado, éter al vacío, lleno el arbusto de campanillas blancas tornasoladas. 

 

Pero otras son las flores que se muestran en el mercado. Los ramilletes de esta mañana en las bancas de la plaza de abastos son clavellinas amarillas y moradas. 

 

Hay además rosas en capullos frescos, ingenuos, con blanca ilusión o roja pasión alrededor de los tallos, atados con hierbas silvestres. 

 

Pero he aquí que llega en este preciso momento la señora que las cultiva en Chulite por donde pasa la sequía de agua fresca y cristalina.

 

7. Como

consuelo

 

He volteado a mirarla cuando ha bajado su atado y ahora los gajos traído en la espalda en una canasta. 

 

Es la madre que las cultiva y la hija que ahora la secunda. Ambas están aquí y ellas dos juntas se han convertido en flores de la vida. 

 

Al lado de ellas, los claveles arrojados y valientes.

 

Detrás del hato de flores que venden siempre hay una mujer candorosa como las flores.

 

Ella sabe el nombre y el sentido de ellos de cada pompón y el significado que tienen. 

 

Pero también del sentido que se atribuye a cada uno de los colores de las flores.

 

Porque siempre las flores son para los momentos supremos.

 

Son para llevarlas a una amada en una circunstancia muy especial. O como consuelo en un entierro.

 

8. Flores

de la vida

 

Estos amarillos intensos a la muchacha que me los vende ¿no se le quedarán impregnados en el alma? Esos fucsias, índigos y cinabrios, el jaspeado de los pensamientos.

 

Casi siempre me pongo a conversar con las señoras que venden las flores.

 

Me encanta oírlas referir como ellas crecen, cuáles son las características de cada una de ellas. 

 

Saben cuál es su edad, el agua con que han sido regadas. Los lazos con los cuales las amarran. 

 

Pero luego me cuentan de sus vidas, de sus hijos, de su esposo y de su casa.

 

Y es que la adopción y la acogida a los sentimientos y a las actitudes auténticas en gran medida y casi siempre lo inspiran las flores.

 

 

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 CONVOCATORIA

 

XV ENCUENTRO INTERNACIONAL

CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA

TELÚRICA DE MAYO, 2014

 

LIMA:

MARTES 20

Y MIÉRCOLES 21

 

TRUJILLO:

JUEVES 22

 

SANTIAGO DE CHUCO:

VIERNES 23

SÁBADO 24

Y DOMINGO 25

DEL MES DE MAYO

 

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