MI AMIGO ES UNA JOYA.
MI AMIGO ES UNA JOYA
Por Norka Brios Ramos
Los amigos como Juan,
no se fabrican en serie
son únicos e irrepetibles,
porque la verdadera amistad
es vinculo terrenal,
que se anuda en tiempo real;
pasos y latidos cercanos
que nutren los sentidos
compartiendo caminos:
buenos y malos.
Juan es amigo sincero,
su amistad no es de apariencias
es afecto verdadero,
por eso es duradero,
no lo rompe el viento de los años
tampoco el tiempo lo desvanece.
Mi amigo es una joya
él trasciende dimensiones
y llega en el justo momento.
Juanito Rodríguez Jara
es trigo y fuego sano,
siempre presente
de lunes a domingo,
amistad que vigoriza el alma,
hombro y brazos abiertos
aliento fresco del alba.
Mi amigo Juan es una joya,
yo te bendigo poeta piscobambino.
MI AMIGO ES UNA JOYA
Por Norka Brios Ramos
Los amigos como Juan,
no se fabrican en serie
son únicos e irrepetibles,
porque la verdadera amistad
es vinculo terrenal,
que se anuda en tiempo real;
pasos y latidos cercanos
que nutren los sentidos
compartiendo caminos:
buenos y malos.
Juan es amigo sincero,
su amistad no es de apariencias
es afecto verdadero,
por eso es duradero,
no lo rompe el viento de los años
tampoco el tiempo lo desvanece.
Mi amigo es una joya
él trasciende dimensiones
y llega en el justo momento.
Juanito Rodríguez Jara
es trigo y fuego sano,
siempre presente
de lunes a domingo,
amistad que vigoriza el alma,
hombro y brazos abiertos
aliento fresco del alba.
Mi amigo Juan es una joya,
yo te bendigo poeta piscobambino.
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Lima, 27 de enero de 2014
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JUAN RODRÍGUEZ JARA:
EL POETA DE LA CONFRATERNIDAD
Por Norka Bríos Ramos
Un día miércoles de madrugada vino al mundo,
fruto del amor de sus padres Rodrigo y Laura;
ocurrió el 27 de enero de 1937 en Piscobamba,
mes de campos que reverdecen en la Sierra;
por eso Juan es la savia que nutre y cuida
las hojas de los arboles natales,
Por Norka Bríos Ramos
Un día miércoles de madrugada vino al mundo,
fruto del amor de sus padres Rodrigo y Laura;
ocurrió el 27 de enero de 1937 en Piscobamba,
mes de campos que reverdecen en la Sierra;
por eso Juan es la savia que nutre y cuida
las hojas de los arboles natales,
y descifra con su pluma
el secreto que guardan sus raíces milenarias.
Seres humanos bendecidos como él,
colman de simiente los surcos poéticos
e iluminan con su fulgor los mitos y leyendas;
son los heraldos que ponen alas a los recuerdos
en el vuelo trashumante de la añoranza
que en el fragor de los años atiza la memoria,
recuerdos de río, de aguacero, de rocío…
como el agua clara que baja canora de los glaciares,
dando vida a raudales, antes de su beso con el mar;
son los que reparten con fe y esperanza
el pan y el vino de la amistad ancashina,
con las manos solidarias del Perú profundo.
Mis ojos han visto amigos de AEPA,
acompañar a Juan al hermano de ruta,
desde la primera, hasta la última lágrima.
Callao, 27 de enero de 2013
el secreto que guardan sus raíces milenarias.
Seres humanos bendecidos como él,
colman de simiente los surcos poéticos
e iluminan con su fulgor los mitos y leyendas;
son los heraldos que ponen alas a los recuerdos
en el vuelo trashumante de la añoranza
que en el fragor de los años atiza la memoria,
recuerdos de río, de aguacero, de rocío…
como el agua clara que baja canora de los glaciares,
dando vida a raudales, antes de su beso con el mar;
son los que reparten con fe y esperanza
el pan y el vino de la amistad ancashina,
con las manos solidarias del Perú profundo.
Mis ojos han visto amigos de AEPA,
acompañar a Juan al hermano de ruta,
desde la primera, hasta la última lágrima.
Callao, 27 de enero de 2013
