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SEMBLANZA BIOGRÁFICA Y OBRAS DE ELMER
NEYRA VALVERDE
Por Juan Rodríguez Jara
Presentamos algunos datos de la vida y
las obras del docente universitario, Dr. Elmer Félix NEYRA VALVERDE. Nació en
Piscobamba, histórica población del Perú eterno. Su solar nativo está ubicado en el corazón de la
Sierra Oriental de Áncash, flanqueada
por la Cordillera Blanca, al oeste y el río Marañón, al este.
Crece en un ambiente de varios primos:
Alcides, Horacio, Wili, Clodo, Pikush,
Otto, y sus tíos Hugo y Ulises conforman un ramillete de familia solidaria.
Aparentemente, las carencias de juguetes hechos, les permitió aguzar su
imaginación y crear sus propios artefactillos de distracción. La magia
imaginativa convertía coronta en un bovino; retacillos de loza, en moneda;
hojitas de planta, en remedios; una tierrita blanca, en azúcar. Un equipo de fútbol: 10 frejoles
del mismo color y otro de diverso matiz.
Por lo mismo, tuvo la oportunidad de
escuchar relatos auténticos de la literatura oral, apasionantes episodios del
viaje que realizó su abuela Julia: de Piscobamba a Cerro de Pasco en 1905. Este
periplo estuvo tejido de muchas aventuras, sorpresas, personajes, anécdotas,
todo magníficamente relatado cautivó su atención cuando era niño.
Su instrucción primaria la realizó en
el desaparecido Centro Escolar 304, en la compañía de una gran cantidad de
niños, tanto de la población cuanto de sus alrededores. Participó de una
educación activa.
Su secundaria continuó en el Colegio
Nacional “Fidel Olivas Escudero” de Pomabamba, donde tuvo la suerte de contar
con dignos maestros como Augusto
Egúsquiza, Hugo Palacios, Ebert Escudero, Renán Olea, Aquilino Santos.
Terminó su secundaria en el Colegio
Nacional “Hipólito Unanue” de Lima. A fines de 1956, su promoción hizo presión
para que se garantizara un local , puesto que, el que se ocupó, se le iba a
devolver a un partido político, fue oportuna y pertinente la actuación de Jorge
Basadre, ministro de Educación en 1956. Precisamente, el poeta malogrado, César Calvo Soriano es su
compañero de la promoción unanuína “Eloy Álvarez”.
Sus estudios superiores los ha
realizado en las universidades de San marcos, La Católica, La Uni. Cuenta con dos licenciaturas y dos
maestrías: en Matemática y en Docencia profesional. Últimamente, se ha
doctorado en el área de Educación Superior en Matemática.
PRODUCCIÓN INTELECTUAL
Publicaciones periódicas
·
Atalaya, boletín informativo a mimeógrafo,
(1959-1961), director y coordinador, alternativamente con Jorge Ulises
Valverde; tres números, en Piscobamba, Áncash.
·
12 de enero, boletín del Club deportivo Mariscal
Luzuriaga, a mimeógrafo (1962-64) tres números,
Lima.
·
Delta, boletín mimeografiado con artículos
científicos, (1962-1964) órgano del Centro de estudiantes de Matemática de la
Facultad de Ciencias de la
Universidad de San Marcos del Perú, director y colaborador;
4 números, Lima.
·
Piscobamba, revista del “Centro Juventud evolucionista
hijos de Piscobamba” (1965), colabora con el artículo Esquema del institucionalismo regional.
·
Ha colaborado
con Eco regional, vocero ancashino,
lo mismo que en Prensa ancashina y Perú Áncash, en varios números, sobre
diversos tópicos de historia, sociedad y folklore.
·
Ha
dirigido, Luz en las Cumbres (2008 y
2009) vocero de la Asociación Fidelina.
·
Club Piscobamba (1998 y 1999), boletín informativo de la
asociación regionalista homónima.
·
Dirige
Piscopampa (Nº. 1: agosto de 2007),
informativo regional.
Opúsculos
· Wayra desojada (setiembre de 1995): Poemario en homenaje por
los 50 años del Colegio Nacional Fidel
Olivas Escudero de Pomabamba, alma
máter del autor.
·
Wiñayuritu, (enero de 1996) poemario bilingüe en
castellano y quechua.
·
Yana mayu Illaqu (enero de 1996), breve antología de la poesía
de Piscobamba.
·
Sursumcorda (Alzad los corazones), en enero de 1996, ofrenda elegíaca en memoria
del poeta Justiniano Escudero Támara, fallecido el 25-12-1995, en Lima.
·
Tsuya Qanchisqocha (febrero de 1999), manojillo poético.
·
Cosecha del alma (mayo de 1999), antología de poesía a la
madre y al padre.
·
Espiga dorada (setiembre de 2006) en nombre de su promoción
del Colegio Fidel Olivas Escudero de
Pomabamba, por el cincuentenario de su
promoción.
·
En
2011, participa y coordina la publicación del Libro de Oro / Escuela Instituto de Ciencias Físicas y Matemáticas 1961.
Editada y compilada por Eloísa Quijada.
·
Gavilla florida (mayo de 2012), composición lírica en
homenaje a las madres, en especial a su querida madre, doña Leonidia Valverde
(Q.E.P.D.).
Libros
·
Cae San Pablo y otros relatos (1995).
·
Rumi Shanka (1996) poemario.
· Tropel de sueños (enero de 1998), poesía y narrativa del
Encuentro de AEPA, realizado en Piscobamba y Pomabamba en 1995. Auspicia Marino
Pastor. Conforman el “Equipo de trabajo”: Guido Vidal, Milton Pastor, Elmer
Neyra, Danilo Barrón, Américo Portella, Áureo Sotelo, Antonino Vidal, Adelmo
Vidal y Elmer Moreno.
·
Provincia de Mariscal Luzuriaga et Piscobamba,
variedad de temas y glosas de
historia, costumbres, datos geográficos de la sierra oriental de Áncash.
·
Por el Parque Nacional Huascarán (2006) costumbres y vivencias diversas.
·
El Libro de Oro Luzuriaguino (2007) en homenaje por los 50 años de la
provincia de Mariscal Luzuriaga (Director de producción y edición). Obra
multiautoral.
·
Evangelio de Félix Montaña (2008), relatos de humus andino y de litoral
peruano.
·
Palpitar en el Ande (2010), poesía y narraciones de la sierra
oriental de Áncash, producción con Walter Vidal, Juan Rodríguez, Antonino Vidal
y Carlos Garay.
·
Libro de Oro de Pomabamba (2011). Colaboró con los artículos: Peregrinación a Chuyas y su complejo
ceremonial y Pomabamba, en los
primeros años del siglo XX. Este libro parte de la iniciativa de Alberto
López Vidal en el seno de la Asociación Fidelina en 2008; y culmina con la
dirección de Pedro Flores Cueva y la presidencia de Magda Vía.
·
Provincia de Mariscal Luzuriaga / capital
Piscobamba / distritos
(2011). Historia, costumbres, cultura popular, leyes y sociedad de la provincia
y de la sierra oriental de Áncash.
·
Semillas del Amanecer (2012). Poemas de carácter infantil y de
raigambre andina y al final, poemas dedicados a los pueblos de Huarás, Sihuas,
Pomabamba y Piscobamba.
DISTINCIONES Y
PARTICIPACIÓN
El Dr. Elmer Neyra Valverde, quien ha laborado en las instituciones
emblemáticas: Universidad de San Marcos y Colegio Guadalupe, cuenta en su haber
de reconocimientos con lo siguiente:
· Diploma de Honor, por haber alcanzado el
primer puesto con sus alumnos de G.U.E. “José Granda” de Lima, en el Segundo
Concurso Nacional de Matemática, organizado por la G.U.E “Bartolomé Herrera”,
auspiciado por “El Comercio” en 1968.
· En 1969, en el Tercer Concurso Nacional de
Matemática patrocinado por “El Comercio” y organizado por la G.U.E “Bartolomé
Herrera”, recibe un Diploma de Honor, por haber obtenido el primer puesto con
sus alumnos de G.U.E. “José Granda” de Lima.
· En 1984, la directiva y profesores del Colegio
Nacional de Guadalupe, le entregan un Plato y un Diploma de Honor.
· Mención Honrosa en el Concurso de Poesía
organizado por la Municipalidad de San Juan de Lurigancho con motivo de los 100
años de nacimiento de José Carlos Mariátegui en 1994. El poemario galardonado
fue: “Empuñando el corazón”.
· En 1998, el Club Áncash le condecora con Laureles magisteriales ancashinas.
· Padrino de la promoción 2005 de la Facultad de
Educación de la Universidad Inca Garcilaso de la Vega, área Matemáticas.
· En 2009, sus ex alumnos de Guadalupe le
entregan la “Insignia al mérito”, por su destacada labor en la docencia
guadalupana.
· 23 de octubre de 2012, Diploma de Honor
concedido por el Colegio Profesional de Antropólogos de Lima y el Centro de
Documentación, Defensa y Apoyo al Folklore por su dedicación amplia y
sacrificada en aras de la conservación y difusión de nuestra cultura
tradicional.
· Ha participado en los encuentros de Huari 2009
y Aucallama 2011 y 2012 organizados por las respectivas municipalidades y la
Asociación de Escritores y Poetas de Áncash (AEPA).
· Se ha hecho presente a los Congresos de
Cultura Andina organizados por San Marcos 2011. Universidad Hermilio Valdizán
en Huánuco 2012, con ponencias sobre diversos temas de la cultura andina en
especial de Áncash.
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LA POESÍA ANDINA DE ELMER NEYRA
Por Néstor
Espinoza Haro
Nos ha sorprendido
advertir recién, después de muchos años de amistad, el quehacer cultural de
Elmer Neyra, que mezcla o, mejor, enyunta, los guarismos y las fórmulas de la
abstracción matemática con el uso normativo y poético del idioma. Duplicidad
infrecuente no sólo en el Perú, sino también en Hispanoamérica. El caso más
conocido es el del argentino Ernesto Sábato, que, de químico, pasó a ser un excelente
novelista y ensayista. Acabamos, pues, de saborear su poemario
"Rumishanka", brasa de piedra, prologado muy enjundiosamente por otro
poeta ancashino del distrito de San Marcos y ya bastante conocido como uno de
los primeros impulsores de la literatura infantil en el Perú, Don Teófilo
Maguiña Cueva.
Nos hemos
detenido en su poesía, porque la narrativa no pasa por nuestra predilección, ni
tenemos la formación teórica y técnica para su abordaje. Para quienes ya
trajinamos por los predios floridos de la poesía, leer el primer verso de un
poema o el primer poema de un libro es como probar la primera cucharada de un
papakashki, que nos dice muy a las claras de lo que queda de la sopa. En muchos
libros sólo abundan los versos y no hay casi nada de poesía.
En algunos
poemas de “Rumishanka", encontramos el mismo aire lírico de los poetas del
Grupo “Orkopata”, que asimilaron muy bien el vanguardismo, como Alejandro
Peralta por ejemplo: "El sol caía a pedradas, / el calor hincaba, hincaba/
como clavitos de fuego” (Se nos murió). "La tarde exhalaba sombras de
rastrojos/ y aromas de chicha corajuda de agosto” (Una fiesta de estancia). “El
sol de junio/enrojecía/ el lienzo verde/ de la plaza risueña. / Por los ojos/
de los pinkullos/ el eco marcial/ hincó el cielo hermoso”. (La pelea de
corpus). Pero en lo esencial es una voz propia que da cuenta de lo suyo:
el hombre, la geografía y la cultura de su región nativa.
Nos hemos
visto, pues, atraídos por su sintetismo y sus remates que son como las
horquetadas que separan en las trillas el grano de la paja. En su nota de
autor, Elmer establece claramente las coordenadas de su quehacer intelectual:
“…quizás haya motivo de buscar los diferentes lenguajes para trasmitir el
éxtasis de la belleza". "Todo lo valioso tiene una urdimbre lógica… y
un soneto tiene tanta lógica interna como un teorema de la geometría, y en ésta
hay tanta belleza… ”Algo que puede perdurar está más allá del utilitarismo…”
"La creación es producto de una vocación, de una entrega, sin esperar
nada". (…) hay corrientes, modas, pero lo más valioso es la
autenticidad". (…) veinte mil años de cultura testimonian que el Perú es
un país andino y pocas centurias (de República) no pueden trastocar esta honda
realidad". Puntos de vista que suscribimos también como nuestros y a mucha
honra. En resumen, para situar esta mixtura en el ideario y la poética de
Elmer, tendríamos que intentar la siguiente fórmula o teorema: La verdad es
bella y la belleza es verdad. Los poemas del autor nos han procurado un
gozo estético profundo, por nuestra afinidad temática, terrígena, idiomática
quechua e ideológica sustancialmente. Cuatrocientos años de muerte no han
matado a nuestra cultura andina que no conoce la muerte, pero sí la
resistencia.
Poesía
sencilla, límpida y fluida y tierna, a la manera andina, como un torrente de
altura, cantarina además, que recoge a su paso el nítido retrato del mundo
andino en todos sus aspectos, con su amor, su añoranza, sus sueños; con sus
cosas representativas como la olla, la coca, la sandalia, el horno, la chicha,
la cancha. Y, por supuesto, con las dos hondas llagas del pueblo andino, la invasión
española y la invasión chilena. “No tengas miedo, hermano, no lo tengas;
/éste es el molino, molino ya viejito, / junto al riachuelo bullanguero.//
Espérate, un ratito espérate, /ya llegarán las buenas mocitas/ya llegarán
quizás con burritas.// Ya llegará también la noche/ a poner cercos en el
camino. / Ya llegará la noche, ya llegará/ a poner corazón en el molino”
(Molino viejo).
Traspasando los Andes Peruanos: llevaron la
cultura a los pueblos orientales andinos
El
Libro de Oro Luzuriaguino, cargado en la espalda, llega a los distritos de
Piscobamba
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Elmer Neyra
siempre presente en los grandes acontecimientos culturales.
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