ÁNCASH AQUILINO
Elmer Neyra Valverde
Tu nombre es del águila, o ANKA, majestad de ave
que nace en los helechos y en los pedernales
de las cordilleras que son
tus surcos de calvario yde esperanza.
Llamarada de plumas y sueños
Son tus águilas o ancash, guardianes
del azul de tus lagunas, de las sonrisas de tus glaciares
de la luna que mira el abrazo de Waskarán y Wantuq.
Áncash eres el águila liviana, azulando
ríes ante el sol y tu cetro brilla en las nubes.
Vienes como semilla remota de la sabiduría
de los cinceladores de los huertos de “Guitarrero”;
vienes en el canto y color de luna de los “pashash”.
Misterio, simetría, geometría de lianas
tejidos en danza eterna de piedras,
es tu rostro forjado por sacerdotes de Chavín.
Sigues iluminando y burilando los rastros
De los vientos que restallan los waris desde el Sur.
Se acercan convoyes de guerreros de Qosqo,
ante ellos, tus hijos del coraje
misioneros de la resistencia
timbales rojos de pundonor
son tus inolvidables
konchuqo, pishqupanpay waraq.
Por poco tiempo Cusco campea
y llegan en gaviotas voraces
y encaballos con ojos de plata
y morriones más duros quela noche
y cañas huecas que vomitan truenos,
los campeadores y los tunantes de la
hambreada Extremadura y la desolada Castilla.
Una larga nevada enfestones de noche
se abaten en el paisaje del viejo águila.
Luz, sangre y remezones en la vieja Europa de 1700.
América convulsa, sacudimiento por la Libertad.
San Martín desde Huaura, arroja de su espada
una semilla primera: Huaylas , que labra
Luzuriaga y Mejía con probidad y tesón.
Bolívar, el volcán del norte, y Sucre, el Abel desangrado
acrisolan en Áncash el épico Sol de la libertad,
que desde las retamas de Ayacucho,por siempre
alumbrará el destino de una América sin amarras.
Salaverry, el relámpago de la pasión y del pundonor,
Y Santacruz, sueño y acero de los
Estados Unidos Peruanos
alzan de nuevola heráldica de Huaylas.
El Sur insomne y desleal con el mandoble de Bulnes
más los cesaristas , los miopes y los plumíferos
de comparsa y fuego,dislocan la luz naciente
de un Perú añejo, el 20 de enero de 1839.
Entre la maraña de intereses y prejuicios
Que se abre a la luz de la verdad, en hilachas,
la curiosidad de Milla Batres
cosecha una respuesta diáfana:
en Pan de Azúcar o en Bollo Agridulce
“el Perú volvió a joderse”.
El paradigmático Antúnez de Mayolo
.
Elmer Neyra Valverde
Tu nombre es del águila, o ANKA, majestad de ave
que nace en los helechos y en los pedernales
de las cordilleras que son
tus surcos de calvario yde esperanza.
Llamarada de plumas y sueños
Son tus águilas o ancash, guardianes
del azul de tus lagunas, de las sonrisas de tus glaciares
de la luna que mira el abrazo de Waskarán y Wantuq.
Áncash eres el águila liviana, azulando
ríes ante el sol y tu cetro brilla en las nubes.
El águila o anka en la cordillera
Vienes como semilla remota de la sabiduría
de los cinceladores de los huertos de “Guitarrero”;
vienes en el canto y color de luna de los “pashash”.
Misterio, simetría, geometría de lianas
tejidos en danza eterna de piedras,
es tu rostro forjado por sacerdotes de Chavín.
Sigues iluminando y burilando los rastros
De los vientos que restallan los waris desde el Sur.
Cueva de Guitarrero en Yungay - Perú
Se acercan convoyes de guerreros de Qosqo,
ante ellos, tus hijos del coraje
misioneros de la resistencia
timbales rojos de pundonor
son tus inolvidables
konchuqo, pishqupanpay waraq.
Por poco tiempo Cusco campea
y llegan en gaviotas voraces
y encaballos con ojos de plata
y morriones más duros quela noche
y cañas huecas que vomitan truenos,
los campeadores y los tunantes de la
hambreada Extremadura y la desolada Castilla.
Una larga nevada enfestones de noche
se abaten en el paisaje del viejo águila.
Mariscal Luzuriaga: digno huarasino
Luz, sangre y remezones en la vieja Europa de 1700.
América convulsa, sacudimiento por la Libertad.
San Martín desde Huaura, arroja de su espada
una semilla primera: Huaylas , que labra
Luzuriaga y Mejía con probidad y tesón.
Bolívar, el volcán del norte, y Sucre, el Abel desangrado
acrisolan en Áncash el épico Sol de la libertad,
que desde las retamas de Ayacucho,por siempre
alumbrará el destino de una América sin amarras.
Chileno Bulnes: mariscal de Áncash
Salaverry, el relámpago de la pasión y del pundonor,
Y Santacruz, sueño y acero de los
Estados Unidos Peruanos
alzan de nuevola heráldica de Huaylas.
El Sur insomne y desleal con el mandoble de Bulnes
más los cesaristas , los miopes y los plumíferos
de comparsa y fuego,dislocan la luz naciente
de un Perú añejo, el 20 de enero de 1839.
Agustín Gamarra: el desacierto
Entre la maraña de intereses y prejuicios
Que se abre a la luz de la verdad, en hilachas,
la curiosidad de Milla Batres
cosecha una respuesta diáfana:
en Pan de Azúcar o en Bollo Agridulce
“el Perú volvió a joderse”.
El paradigmático Antúnez de Mayolo.