2012. ¿QUÉ HACER?
Por Walter Vidal Tarazona
En nuestro planeta -ya una pequeña aldea gracias a las tecnologías de la comunicación, facilitadoras de los servicios del comercio internacional y de integración regional y mundial- nada de lo que ocurrió en la economía el 2011 fue independiente de lo que sucedió los años próximos que le precedieron.
Para referirnos a la crisis financiera actual hay que partir de la crisis de la economía global, que en 2011 parecía que se había superado; pero no sucedió así, a pesar del cumplimiento estricto de la mayoría de los países desarrollados a las recomendaciones del FMI en el sentido de no retirar los estímulos monetarios (de los gobiernos) a las empresas (como premiando a la ineficiencia de gestión empresarial).
La crisis es sin duda bastante fuerte. La reflexión más profunda que hemos leído corresponde a Benedicto XVI (2009), cuando pide que se tome con seriedad, pues -dice-, ésta tiene numerosa causas y manda una fuerte llamada a una revisión profunda del modelo de desarrollo económico global. Es un síntoma agudo que se ha añadido a otros también graves y ya bien conocidos, como el perdurar del desequilibrio entre riqueza y pobreza, el escándalo del hambre, la emergencia ecológica...
Muchos periodistas comparan con la del 30. Pero la actual, en su peor momento, no fue devastador como creyeron algunos, entre ellos nuestro Premio Nóbel de Literatura MVLL, quien dijo, en un arranque de valentía, que el sistema capitalista se había hecho trizas, y no por acción de sus viejos enemigos, los comunistas y los socialistas radicales, sino por efecto de lo que el profeta Marx llamaba sus ´contradicciones internas`, es decir la corrupción e irresponsabilidad de sus banqueros, financistas, empresarios, especuladores y piratas, que, enceguecidos por la fiebre del lucro y la voracidad crematística, fueron empujándolo hacia el abismo, donde terminó por rodar y hacerse trizas (casi).
Muchos periodistas comparan con la del 30. Pero la actual, en su peor momento, no fue devastador como creyeron algunos, entre ellos nuestro Premio Nóbel de Literatura MVLL, quien dijo, en un arranque de valentía, que el sistema capitalista se había hecho trizas, y no por acción de sus viejos enemigos, los comunistas y los socialistas radicales, sino por efecto de lo que el profeta Marx llamaba sus ´contradicciones internas`, es decir la corrupción e irresponsabilidad de sus banqueros, financistas, empresarios, especuladores y piratas, que, enceguecidos por la fiebre del lucro y la voracidad crematística, fueron empujándolo hacia el abismo, donde terminó por rodar y hacerse trizas (casi).
Algunos economistas vieron venir, como epílogo de todo este suceso, un cambio profundo en el sistema (Stiglitz opina que la teoría económica tradicional ha fracasado), mínimamente una regulación so pena de presenciar un estancamiento de la globalización; tampoco sucedió eso, es decir lo de una mayor regulación; muy por el contrario, los gerentes, administradores y funcionarios de las empresas más grandes se pusieron a buen recaudo, y sus instituciones, fieles a la prédica del mercado, corrieron en busca de ayuda de los gobiernos, mientras la crisis se expandía.
Robert Solow, también premio Nobel de economía como Stiglitz, advertía que debemos estar preparados para enfrentar un crecimiento pobre. El premio Nobel de economía 2001 aconseja que los países sudamericanos deben profundizar la industrialización y fortalecer el mercado interno (ojo con esto) ya que las materias primas no son suficientes para el crecimiento, menos para el desarrollo. Considera el gurú en economía (ojito, ojito) que los ajustes fiscales, como los que se han emprendido en Grecia, Irlanda, Portugal y otros, conducen al estancamiento; y también opina que los EE.UU. y Europa, que enfrentan la caída de sus exportaciones, fortalecerán la demanda interna y buscarán presionar a que bajen los precios de las comodities para mantener los niveles de demanda.
Aunque la presente crisis, a diferencia de las anteriores (efecto tequila, efecto arroz, etc.) es crisis del mundo desarrollado (empezó en EE.UU el 2008), hay una justa preocupación de las economías emergentes, por la interdependencia entre ambas economías; en 2009 las bolsas de China, Brasil, Rusia superaron a las de EE.UU. y Europa, debido a su fortaleza y la estabilización de sus sectores financieros; en 2010, sin embargo se involucran en la "guerra de divisas" (dólar, euro, yen) rebajando la cotización de sus monedas, que terminó en un enfrentamiento comercial.
Es así el panorama como en 2011 encuentra esta crisis a estos países en vías de desarrollo, pero mejor parados. Uno de estos países es el Perú. Ayer escuchábamos al presidente Ollanta responder a tres panelistas en un canal televisivo (se nota que estos medios en nuestro país están más fuertes que nunca), y nos agradó referirse a la agricultura y a la educación con cierto entusiasmo, también el manejo de algunas cifras reales para sustentar que el gobierno está acometiendo con decisión en estos sectores. Ojalá que así sea. Se olvidó del turismo, cuya importancia para el Perú es extraordinaria, por sus potencialidades nada explotadas aún. Pues si se quiere una economía de inclusión y respetuosa de la naturaleza, pues allí tenemos a esta actividad con fábricas sin chimeneas. Habló también de la minería ilegal, que se formalizará y se establecerán "vedas" para que reforesten el paisaje. ¡Ojalá! que así sea. Bien por la mejora de las remuneraciones en el sector militar que ha empezado por la tropa. Dijo que el problema de seguridad es tema de confianza. Si eso es así, pues darles primero a la gente que votó por él.
En síntesis, no se puede hacer un análisis de la situación social ad portas del nuevo año sin referirse fundamentalmente a la crisis global que aún no se ha resuelto y que sigue siendo una amenaza para el país. El Perú es uno de los países que no ha sentido mucho las consecuencias de esta crisis y posiblemente se halle en mejor situación para poder enfrentarla. Hemos escuchado a su Presidente que hay un fondo de estabilización de más de siete mil millones de dólares; y se supone que también una estrategia coherente con el plan de un gobierno "nacionalista".
Esperamos un relanzamiento de la agricultura, un proceso de industrialización eslabonado con la agricultura, el turismo y la artesanía fundamentalmente. Y teniendo a la educación como pivote del desarrollo, centrada en mejorar la calidad de la educación en todos sus niveles, especialmente en el universitario dando apoyo a las universidades nacionales para que se preocupen de proporcionar a las fuerzas productivas de la innovación que responda a nuestra realidad.
Es sólo esto lo que queríamos decir en esta oportunidad, porque los medios periodísticos grandes y pequeños llenan sus portadas y ventanas con noticias faranduleras y otras contaminadas de sangre y homosexualidad.
Enero, 2012 (WVT)
PALPITAR DEL ANDE: Washi, Lucy y Walter
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Enero, 2012 (WVT)
PALPITAR DEL ANDE: Washi, Lucy y Walter