lunes, 5 de julio de 2010

GRANDES MAESTROS: ANDRÉS CÁSTULO RIVERA

.

ANDRÉS CÁSTULO RIVERA

Por Armando Alvarado Balarezo (Nalo)

En Chiquián de mi niñez, la educación técnica en la Escuela Pre Vocacional de Varones 351, fue uno de los pilares básicos en el desarrollo de la creatividad de los alumnos, constituyéndose en parte esencial del proceso educativo, opción innovadora que con el tiempo fue cediendo paso a un solo componente: el aprendizaje memorístico.
.
Aquellos talleres ponían en las manos de los educandos las herramientas para forjar sus individualidades, pero al mismo tiempo potenciaban las relaciones de grupo, tan necesarias en un pueblo campesino, que siguiendo las huellas de "Luis Pardo, no espera las migajas del centralismo, sino del trabajo en equipo, como una manera de frenar la fuga de talentos que enriquece y hace más competitivos a los países que emigran, sin haber apostado un céntimo por su educación.
.
Uno de los seres humanos que desde niño reservó su propio espacio de ciencia popular, para constituirse con el paso de los años en uno de sus principales cultores en el 351, fue el Maestro Cástulo Rivera, cuya existencia vital en los talleres del saber creador, fue clave para que sus alumnos opten por las carreras científicas, que muy pocos abrazan por falta de motivación en nuestro amado Perú; y justamente, uno de sus discípulos más connotados: Agustín "Acucho" Zúñiga Gamarra, trata por todos los medios de emularlo a través del Centro Provincial de Ciencia, Tecnología e Innovación, que después de un compás de espera, va hallando eco saludable para su funcionamiento, porque la riqueza del conocimiento es inagotable, mientras que la riqueza extractiva languidece en corto tiempo, destruyendo el ambiente. Instituto que debería llevar el nombre de tan insigne educador, que el 3 de noviembre de 1,914 viera la luz primera en "Espejito del cielo", hijo de nuestra recordada Juanita "Capuliñahui", y que todos recordamos como don Cashtu.
.
Dios, que todo lo ve, premió a don Cástulo con muchas cualidades que hoy escasean en el mundo, llegando a dominar la carpintería, la escultura, la pintura y la buena guitarra, que lo llevaron a ser bautizado cariñosamente por el Inspector Regional de Educación Marcos Lemus Rivas, como: "La alforja del diablo", por ser un solucionador de imposibles. Una persona cordial, respetuosa y dulce calidad humana.
.
Felizmente casado con la dama Basilia Roque Huaranga, una hermosa mujer, natural del pintoresco Llamac, trajeron al mundo a Juana Enriqueta “Cota”, Sara Esperanza “Epi”, Iván Moisés, Sofía Antonia “Chopa”, Cástulo Hugo “Cashtu”, las gemelas María Andrea y Filiberta Basilia “Las Mayis”, Pedro Antonio “Peyo”, Flora Atilia “Poli” y Angel Máximo “Angelito”. Seis de sus hijos siguen sus huellas magisteriales y todos forman un coro musical con guitarra, flauta, zampoña, charango y demás instrumentos andinos, como medio efectivo de unidad familiar.
.
En sus años juveniles trabajó como maestro de obras en Chosica y Lima, y pintó murales en Huacho, pero su amor por Chiquián pudo más y retornó, siendo invitado para desempeñarse como profesor en el área técnica del 351. Penetrar a las aulas de la Pre Vocacional es impregnarse del alma de sus murales que se aferran a las paredes raídas, que el tiempo, la indiferencia y el olvido intentan arrebatarnos.
.
El Maestro Rivera no solamente enseñó con su ejemplo, sabiduría y disciplina, sino que fue más allá de lo declarativo, gracias a su permanente actitud para el trabajo. Él inculcó, motivó y despertó en el fuero interno de muchas generaciones de paisanos el conocimiento científico, como siempre rememora Acucho durante nuestras reuniones del Comité de Gestión: "El Maestro Cashtu nos enseñó a fabricar tizas de color con insumos extraídos de las tunas de Shapash, Cucuna y Ninán". Yo lo recuerdo como uno de los seres humanos que me guió durante mis visitas a la Iglesia Matriz de Chiquián, llenando mi vida de espiritualidad, que tanta falta me hacía como adolescente travieso, sobre todo en la Semana Santa y la fiesta de Santa Rosa de cada año.
.
Grata ocasión la de hoy, domingo 5 de julio del 2009, víspera del Día del Maestro, para recordar a don Cashtu con el cariño y la admiración que merece un Maestro, Padre y Ciudadano ejemplar, que le dio dignidad a la Ciencia Popular en su modesto taller de creación científica, poniendo en movimiento el cerebro de sus alumnos como maquinaria de progreso, dignidad que el Estado le niega, porque no grita en las plazas ni marcha en las calles.
.
El Maestro Cástulo Rivera fue llamado al Reino de Dios el 6 de junio del 2001 en la ciudad de Huacho, "Capital de la Hospitalidad", dejándonos un importante legado que debe ser aprovechado al máximo para enfrentar la globalización, que aunque parece acercarse a los pueblos olvidados, irónicamente son los que con mayor urgencia necesitan de hombres como él, empeñados en poner la Ciencia Popular al alcance de todos.

.
DESCANSE EN PAZ MAESTRO CÁSTULO
.