viernes, 24 de junio de 2011

24 DE JUNIO: DÍA DEL CAMPESINO - PLAN LECTOR: EL NIÑO CAMPESINO Y LA EDUCACIÓN EN EL PERÚ - POR DANILO SÁNCHEZ LIHÓN

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CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA

Construcción y forja de la utopía andina


JUNIO:

MES DE LOS NIÑOS, DEL MEDIO AMBIENTE, Y DE LA IDENTIDAD ANDINA


CAMPAÑA MUNDIAL:
¡CIUDADANO QUE AMAS
A VALLEJO Y LA POESÍA!
DEFIENDE A SANTIAGO DE CHUCO
DEL INTENTO DEL ALCALDE QUIEN
INSISTE EN CAMBIAR SU PLANO URBANO
DESTRUYENDO ADEMÁS LA CÁRCEL
Y LA CASA DE LUIS FELIPE
DE LA PUENTE UCEDA


CALENDARIO DE EFEMÉRIDES

24 DE JUNIO

DÍA DEL CAMPESINO
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CELEBRACIÓN

SÁBADO 25 DE JUNIO, 2011, 7.00 PM.

HOMENAJE A VIRGILIO ROEL PINEDA, APU TUTELAR

PROGRAMA

1. Palabras de saludo, bienvenida y presentación: DANILO SÁNCHEZ LIHÓN Presidente de Capulí, Vallejo y su Tierra

2. Virgilio Roel Pineda maestro de identidad: ANGÉLICA ARANGUREN

3. Conferencia magistral “El Perú indígena”: VIRGILIO ROEL PINEDA

4. Primer comentario a la conferencia: MARÍA LUISA AGUILAR

5. Segundo comentario a la conferencia: RODOLFO SÁNCHEZ GARRAFA

6. Entrega de la distinción “Amauta del Perú”: CÉSAR VALLEJO YNFANTES


LUGAR DE REALIZACIÓN:


Aula Capulí: Tacna 118, Miraflores.
Cuadra 3 de la Av. Angamos Este
Entre Av. Arequipa
y Paseo de la República

Ingreso libre.
Se agradece su gentil asistencia

Teléfonos Capulí: 420-3343 y 420-3860
planlector@hotmail.com


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PLAN LECTOR, PLIEGOS DE LECTURA

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EL NIÑO CAMPESINO Y LA EDUCACIÓN EN EL PERÚ



Por Danilo Sánchez Lihón

1. Él mismo un indio

A los pocos días de ingresar a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, uno de los impactos más extraordinarios que experimenté fue leer en la Biblioteca Central de la universidad situada en el Patio de los Naranjos, la siguiente frase de Manuel Vicente Villarán:

Lo mejor del Perú y lo que permanece puro e incontaminado es el indio.

Fue tremendo, estremecedor e vibrante para mí sentir toda la dimensión de esa advertencia. Recién entendía con meridiana claridad y con toda mi razón encendida, que lo mejor de la historia del Perú fue la resistencia andina a la opresión, tan gloriosa como el heroísmo del Perú en la Guerra del Pacífico.

Fue revelador, porque toda mi vida anterior había sido escuchar insultos, ofensas y maldiciones para con todo lo que fuera indígena, como si ello fuese un atraso, un rezago prescindible y aquello que nos jalaba hacia abajo y hacia atrás.

Salvo la actitud de mi padre, no defendiéndolo sino siendo él mismo un indio, en su actitud y en su arte. Y mi madre prodigando a los campesinos su devoción y cariño.

2. Era cierta

Aquella frase me dejó entonces una sensación valerosa, vivificante y dulce, de esperanza cristalina para mi alma, porque yo sabía que eso era verdad. Inflamó una llama en mi ser y me condujo a creer en algo, en mucho y quizá en todo. Y acrisolé en mi corazón todas las imágenes de candor y de ternura que recordaba de la gente del campo y hasta viví prendado de la imagen de una niña campesina. Era aferrarme a lo que antes había sido tan vilipendiado y maltratado.

Porque pese a que mi pueblo es andino y está enclavado en la serranía en él escuché, incluso en gente buena, desprecio atroz por lo indígena. Por eso, leer esa frase fue para mí también la constatación de haber llegado a la universidad que siempre fue faro y antorcha en la vida de mi país.

Había vivido ese desprecio al indio, porque el peor insulto que se podía escuchar, en uno y otro pueblo, era: ¡Indio! ¡Chacrero! Y se repelía todo lo que él representara como algo abyecto, vergonzante y hasta infame.

Se lo consideraba rémora para el desarrollo del país, vinculado al embrutecimiento de la coca y el alcohol, indolente y supersticioso. Sin embargo, la frase volvía a ordenarme el mundo, puesto que era cierta.

3. Caminaban desde la madrugada

La historia solo en apariencia ha cambiado. Sin embargo, en los homenajes al campesino que ahora se hacen se reconoce el trabajo significativo de hombres y mujeres que cultivan el campo y aportan con su labor al desarrollo social.

A ellos nuestro reconocimiento. Pero, esta vez quisiera hablar de un aspecto aparentemente supletorio, lateral y situado a una orilla del meollo del tema que hoy se celebra: el Día del Campesino.

Es un detalle aparentemente precario, cual es el niño campesino en la escuela del pueblo nobiliario y añejo, como es o fue mi pueblo en el tiempo en que yo estudié de niño.

Venían ellos, a la escuela donde yo cursé la Educación Primaria en Santiago de Chuco, desde lugares distantes. Eran niños del campo que para llegar a las aulas caminaban desde la madrugada.

Pese a que tenían todas las desventajas su limpieza era diáfana, nunca llegaban tarde y en muchos casos superaban en notas y en comportamiento a los niños de la ciudad.

4. ¿Volvió a la tierra?

Expondré un caso del cual existen registros: el poeta César Vallejo nació en el pueblo de Santiago de Chuco, no en el campo.

Sus calificaciones siempre fueron excepcionales, sea en la educación primaria, secundaria y superior.

Como alumno en la Educación Secundaria, César Vallejo fue brillante en el Colegio San Nicolás de Huamachuco, pues así lo reflejan sus promedios finales.

Sus notas figuran en los certificados emitidos por el colegio, donde como alumno de asistencia regular, los años 1905 y 1906, alcanzó la nota de 19 puntos, como promedio, al final de aquellos años.

En los grados siguientes, en el período de 1907 a 1908, ya como alumno libre, que no asistía a clases sino que se presentaba solo para rendir exámenes, su promedio general fue de 18.

Sin embargo, no fue el mejor. En las aulas del Colegio San Nicolás otro estudiante también procedente de Santiago de Chuco lo superaba.

Pero, además, este joven era de origen campesino llamado, Saúl Benites, quien fue el primero de su clase.

¿Qué fue de él? Es curioso: No es célebre ni se conoce su rastro por el mundo. ¿Volvió a la tierra? ¿Se mimetizó en ella?

5. Tesoros rústicos

Si Vallejo fue genio y se aplicaba con ahínco en sus estudios, había otro a su lado más excepcional, pero natural del campo.

¿Cuántos otros talentos no nos prodigan la tierra, como también los esconde y sublima? Y son personas con cualidades que sorprenden.

Así por ejemplo, de los alumnos campesinos en mi escuela admiré su creatividad para resolver problemas, para afrontar adversidades, para ser solidarios. Y si algo conozco de virtudes fueron las que siempre vi que ellos las encarnaban.

En ellos no solo relucía la valentía, la veracidad, el sacrificio sino otros dones que ya no se reconocen como valores, tal la renuncia, tal la inocencia, tal la abnegación.

Pero esta nota trata de otros tesoros más rústicos, pero en mis recuerdos excelsos.

También por la actitud con que nos los ofrecían y prodigaban, me refiero a su fiambre o sus comidas.


Nos la obsequiaban generosos, incluso ahora lo pienso, quedándose ellos casi sin comer, porque lo traían y compartían abiertamente con nosotros.

6. Una loma y una quebrada

Vayan estas líneas agradecidas a ellos pero también a la Escuela Pública que nos unía a todos los niños, sin distingos de ninguna especie, algunos con zapatos, otros con ojotas.

Y otros que asistían descalzos, pero donde todos jugábamos comulgando por igual.

Todo su yantar lo traían y compartían con nosotros, nacidos y crecidos orgullosamente en la ciudad, en donde poco tenemos de lo que es verdadera riqueza, aunque ostentemos tenerlas y hasta seamos tan despreciativos. Felizmente, la historia nos desmiente y todo lo corrige a tiempo en lo que corresponde a estas imposturas y vanidades.

Consigno aquí por ejemplo algunos datos: En el certamen Capulí, Vallejo y su Tierra del año 2005, visitamos la campiña de Cotay y un escritor del lugar, el Dr. Melanio Delgado Siccha, presentó con dicha ocasión un libro alusivo a ese recodo mínimo, apenas una loma y una quebrada.

En dicho estudio y memoria se consignan los nombres de tres mil profesionales que residen ahora en Europa, Japón y Estados Unidos, que nacieron y crecieron en ese paraje.

7. Naturales talentos

¿Qué hay allí? Ni siquiera una plaza, ahora recién una capilla, recodo donde hay unas cuantas casas humildes, pero bellas en el espíritu, regadas entre colinas y hondonadas.

Y así, mucho de la construcción del Perú actual se debe a aquellos niños del campo que han alcanzado a ser destacados hombres de bien y grandes profesionales.

Ellos nos han superado por su ímpetu, por madrugar amaneciendo por los caminos, por ser generosos en sus afectos y puntuales en su comportamiento.

Y, sobre todo, por sus inmensas virtudes. A ellos agradezco el frescor de haber compartido conmigo el aroma y sabor de los alimentos de la tierra, que son los prodigios primeros que nos regala la vida.

Como maravillas son los niños y sus naturales talentos, como era Saúl Benites el compañero campesino que superaba a César Vallejo.

8. ¡Ellos, nunca!

En una entrevista que yo hiciera al profesor Jacinto Diestra, quien estudió en la misma escuela donde yo estudiara, él evoca vivencias relacionadas a este mismo tema y lo hace del siguiente modo, diciendo:

Pero aquí ha de valer que rindamos un homenaje a esos muchachos, nuestros compañeros que venían del campo después de caminar cuatro, ocho, diez o más kilómetros y, sin embargo, llegaban al pueblo y a la escuela antes que todos nosotros, que vivíamos en la ciudad. O que vivíamos ahí no más, al lado de la escuela.

Ellos, ¿acaso tenían reloj? ¿Alguien ha visto a alguno de ellos que tenía reloj? ¡No, no tenían! En cambio, yo por ejemplo, vivía a una cuadra de la escuela ¡y yo sí tenía reloj! Y, sin embargo, llegaba a veces tarde o con las justas a la formación ya en el patio. ¡Ellos, nunca!

Y es que cuando escuchaba el segundo campanazo recién me levantaba con todo de la cama, agarraba ahí no más el agua de las goteras, esa agua helada que recogemos en barriles o baldes, y me lavaba la cara, así como el gato.

9. El imaginario de la gente

Y continúa:

Me secaba con mi pañuelo y me iba con dos panes en mi bolsillo: ¿para qué? Para canjearlos en la escuela con el "Mono" Segundo Paredes, quien se acuerda todavía de estos hechos, a quien yo le daba los panes y él me entregaba capulí de sus chacras, o llacones.

Yo llegaba con las justas y mis compañeros del campo, ¿ah?, con sus llanques y pantaloncitos arriba de la canilla, me ganaban.

Yo me he preguntado también eso: ¿por qué usan el pantaloncito alto? Y es por la lluvia, ¡debido a que tienen que pisar el agua que hay en los caminos! Y, para que no se mojen, usan el pantaloncito arriba.

Esos niños eran los niños más sanos y puros que yo tengo registrados en mi memoria. E iban con la esperanza de que nosotros también les enseñemos algo nuevo. Y como que así era:

– Yo el otro día he estado en Trujillo. –Decía uno. Y ellos escuchaban con mucha atención.

Y es que la educación y la escuela siempre han formado parte del imaginario de la gente campesina, como lo ejemplifica Ciro Alegría en su novela El mundo es ancho y ajeno.

10. Todo acto y voz genial

En ella los albañiles de la comunidad que siguen levantando el edificio de la escuela, al lado de la capilla de Rumi, donde había sombra y aroma de eucaliptos, es este el diálogo que entablan dos comuneros:

– La verdá, ya tendremos escuela. Me habría gustado demorarme en llegar al mundo, ser chico aura y venir pa la escuela...

– Cierto, sería bonito...

– Pero también es güeno poder decir a los muchachos: “vayan ustedes a aprender algo”...

– Cierto taita... yo tengo dos; ellos sabrán alguna cosa; porque es penoso que lo diga; yo tengo ya la cabeza muy dura. Si veo un papel medio pintadito de eso que llaman letras, me pongo pensativo y como que siento que no podría aprender, ¡hasta tengo miedo!...

– Es que nunca, nunquita hemos sabido nada –respondió Rosendo Maqui– y luego con fervor: –Pero ellos sabrán... ellos sabrán... Ellos sabrán...

Es por eso que César Vallejo dijera:

"Todo acto y voz genial viene del pueblo y vuelve hacia él, de frente o trasmitido".


Texto que puede ser reproducido citando autor y fuente

Teléfonos:

420-3343 y 420-3860

Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:

Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Editorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.pe
Instituto del Libro y la Lectura: inlecperu@hotmail.com


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